Σ Estos activos pueden crecer a una tasa del 5% en las próximas tres décadas
Los fondos de inversión, especialmente los regulados en la Unión Europea con la marca UCITS, están abocados a crecer gracias al impulso regulatorio, a la credibilidad de la marca y sobre todo a su condición de vehículos de inversión a largo plazo en un entorno demográfico que obliga a complementar las pensiones públicas con el ahorro privado. Según un informe de la asociación de fondos luxemburguesa, Alfi, el volumen de los fondos UCITS tiene un potencial para crecer a una tasa del 5% en las próximas tres décadas, con una previsión de suscripciones netas anuales medias crecientes, desde los 201.000 millones de euros de 2017 hasta los 860.000 millones en los próximos 30 años. Es decir, el patrimonio de los fondos seguirá creciendo, apoyado en parte por los inversores, que destinarán sus ahorros a estos vehículos.
Según la asociación de Luxemburgo –que es el país donde más fondos UCITS se domicilian para comercializarse en otros mercados-, en la medida en la que se afronten algunos factores de riesgo, esta ratio de crecimiento debería cuadruplicar el volumen de los fondos UCITS hasta alcanzar los 42 billones en 2048.
El informe de la asociación, elaborado por Broadridge, vaticina que la unión de los mercados de capitales en Europa y las iniciativas locales para impulsar los ahorros de largo plazo (con el objetivo de hacer frente a los retos demográficos) apoyarán el futuro crecimiento de los fondos en toda Europa. Además, y a pesar de que se espera que los reguladores europeos tomen a cabo medi- das para proteger a sus propios mercados, Alfi estima que la fortaleza de la marca UCITS significa que es esta la estructura con más posibilidades de ser adoptada por los inversores.
«Los datos, que muestran el desarrollo de los fondos UCITS desde que nacieron en 1988, muestra el éxito de la marca en términos de crecimiento de activos pero también de su alcance global, así como su potencial de resolver el reto de una demografía cambiante en la medida en que la ratio de dependencia se doblará durante los próximos 30 años, hasta alcanzar el 51%», dice Denise Voss, presidenta de la asociación.
Exportar los fondos
La experta asegura que la huella global de los fondos UCITS encaja bien para la próxima década, en la medida en que la población de muchos de los mercados más nuevos o emergentes se ve incentivada por sus gobiernos a completar sus pensiones públicas. «Los reguladores en la mayoría de países no europeos querrán construir una franquicia de fondos locales, pero las estructuras normativas que utilizan podrían estar basadas en fondos UCITS, algo que solo puede significar buenas noticias cuando las puertas empiecen a abrirse», explica. Es decir, confía en que los fondos europeos se exporten, como ya está ocurriendo, a mercados emergentes.
Además de su huella global y de las necesidades que impulsarán la inversión en estos vehículos, Voss espera también que se beneficien de iniciativas como la unión del mercado de capitales: «Podemos esperar que los UCITS sean un claro beneficiario del lanzamiento de la unión del mercado de capitales, que busca incrementar las inversiones y las opciones disponibles para los inversores minoristas e institucionales, y migrar gran parte de la gran cantidad de ahorros en depósitos hacia inversiones gestionadas».