Hacia un pacto de Estado _

«E n España podemos hablar de una década perdida en I+D+i, la llegada de la crisis obligó a poner el contador a cero y el problema es que los efectos de este parón se notarán a medio y largo plazo, así son los ritmos de la ciencia, no somos conscientes de que lo que hemos hipotecado ha sido nuestro futuro » , asegura Jorge Barrero, director general de Fundación Cotec. En 2013 -último año del que se disponen cifras definitivas- el gasto en I+D ejecutado en nuestro país fue de 13.012 millones de euros (una caída del 2,8% respecto al año anterior). Un recorte que profundiza la tendencia a la baja que se viene registrando desde 2009. Hasta ese año, España había conseguido recuperar parte de la ventaja que le sacaban sus vecino europeos, gracias a unas tasas de crecimiento del gasto en I+D superiores incluso a las de los países líderes en esta materia. Sin embargo, la paralización de las inversiones han dejado los datos actuales al mismo nivel que en el año 2003.

La I+D+i es un árbol que necesita tiempo para dar sus frutos, no se trata de una apuesta a corto plazo. Quizá por ello cada vez son más las voces que claman por una receta que incluye al menos diez medidas.

Más inversión pública

La ciencia se ha visto muy comprometida por la crisis y la incipiente recuperación no ha permitido paliar aún los recortes acometidos. Actualmente, la inversión en I+D+i supone un 1,6% sobre el PIB, muy lejos del 3% que la Unión Europea plantea que deben invertir los estados miembro a partir de 2020. La apuesta pública debe ser el pilar básico de la inversión en ciencia.

Incentivos a la inversión privada

Los expertos abogan por generar mayores incentivos fiscales a la I+D. Se trata de ir más a allá de una reducción de las cotizaciones y bonificar también las inversiones de capital riesgo en actividades emprendedoras que sean innovadores.

Agencia Estatal de Investigación

Se trata de un organismo, previsto en la Ley de la Ciencia, que permitiría mantener a la ciencia al margen de los vaivenes presupuestarios. Debía estar en funcionamiento en 2012, pero aún no se ha creado, aunque podría ver la luz en las próximas semanas.

Mayor número de becas y de ayudas

Mayor número de becas y ayudas en educación e innovación ahora que se está saliendo la crisis ha sido el objetivo en la última legislatura del Gobierno de Mariano Rajoy, que ha logrado la sostenibilidad del sistema educativo y la mejora de la calidad. Y es que un aumento tanto de becas como de ayudas lo que origina es más rendimiento y mayor número de estudiantes en los centros educativos público-privados.

Reorganización de los entes públicos de investigación

La modernización de gobernanza de los organismos públicos de investigación es uno de los de los reclamos unánimes entre los investigadores. Su estructura actual, aseguran, hace que estos entes sean muy poco competitivos.

Utilizar el incentivo de las compras públicas

Un terreno que aún está por explorar en España es el uso de las compras públicas como incentivo a la innovación. Se trata de premiar a las empresas que apuesten por soluciones innovadoras con bonificaciones en los concursos públicos.

Gobernanza de la Universidad

Los centros universitarios deben ser la cantera de la ciencia española. Uno de sus puntos débiles es la gobernanza, muy alejada de los patrones de una gestión moderna, lo que les resta competitividad.

Premiar los vínculos público-privados

Los expertos reclaman un tratamiento fiscal ventajoso para aquellas empresas que canalicen sus inversiones en I+ D+ i a través de la universidad. De esta forma, aseguran se lograría acelerar los resultados tangibles de las investigaciones. Se trata de conectar la ciencia con la realidad porque cuando la iniciativa es sólo pública, los resultados suelen ser muy a largo plazo.

Pacto político por la I+D+i

Todos los partidos políticos han abogado por firmar un pacto de Estado por la ciencia que dé un consenso general tanto a su modelo como a su financiación. No obstante, este pacto no debe quedar en papel mojado pues lo cierto es que ya hay muchas propuestas recogidas en la Ley de la Cien- cia y sólo hay que ponerlas en marcha

Más espíritu innovador en las escuelas

Los expertos reclaman también que los cambios en educación empiecen en los primeros años de escuela. Se trata de potenciar y premiar el espíritu innovador entre los niños y jóvenes. Y es que, pese a la mejora del fracaso escolar, éste continúa siendo mucho mayor en nuestro país que el núcleo de Europa. En España, en 2013, este porcentaje era el 23,6%, más del doble de las cifras de Francia, o de Alemania.