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Puertas para el crédito _
Las empresas innovadoras andaluzas tienen varias vías para optar a la financiación tanto complementaria como alternativa a la bancaria
FONDOS EL CDTI VA A MOVILIZAR ESTE AÑO 1.600 MILLONES PARA PROYECTOS DE I+D+I
E n el camino del emprendimiento, uno de los primeros baches que deben sortear los emprendedores andaluces es cómo conseguir los fondos económicos necesarios para convertir una idea innovadora en un proyecto empresarial. La crisis económica ha cerrado el grifo del crédito a muchas pequeñas y medianas empresas que apuestan por la I+D+i, y aunque parece que el flujo económico de los bancos es ahora más activo, todavía resulta insuficiente, por lo que es imprescindible buscar nuevos proveedores financieros.
Ante un futuro incierto con necesidades inciertas, la diversificación de fuentes de préstamo más que una opción es una garantía de supervivencia para las empresas. En este sentido, el presidente de la Comisión de Financiación de Pymes de la CEA, Ignacio Contreras, destaca que «la patronal está contactando con los principales family office andaluces (grandes fortunas) para tratar de que dentro de su actividad inversora reserven una porción para las empresas innovadoras y las start up». Este economista, socio director de Globo Finanzas, sostiene que en este momento existe «una red de business angels muy desarticulada, poco organizada y sin mecanismos de cooperación entre las mismas». Frente a ello, apunta que la patronal andaluza puede servir para unir a este tipo de iniciativas y a las grandes empresas para favorecer la financiación de compañías en fase de desarrollo.
Dentro de la financiación complementaria a la bancaria hay un nicho que está poco cubierto. Es el caso del primer estadio o ronda de financiación de un proyec- to empresarial emergente y con un plan de negocio maduro, que requiere inversiones iniciales de en torno a 150.000 euros. «Es un campo desasistido y hacia dónde las grandes empresas pueden canalizar sus políticas de Responsabilidad Social Corporativa». A juicio de este profesor de Finanzas de la Universidad de Sevilla el gran ejemplo a seguir es la actividad que está realizando la firma almeriense Cosentino, ya que entre los objetivos de su family office se encuentra respaldar a empresas con proyectos innovadores en el campo de los nuevos materiales.
La cooperación entre grandes empresas y business angels es un paso en la estrategia de fomentar la financiación complementaria a la banca, un aspecto en el que también es fundamental la iniciativa pública. «Hay negocios no bancables o difícilmente desarrollables con capital privado y donde los créditos públicos pueden ayudar». De hecho, el nuevo marco de ayudas de la Unión Europea se centra en el apoyo a las pymes.
También hay que racionalizar todas las iniciativas de financiación públicas. «Crear un organismo que fusione los mecanismos de financiación pública que puede liderar la Junta de Andalucía y que hoy están dispersos entre distintas consejerías y agencias me parecería una idera buena».
En este momento, las administraciones están muy implicadas en fomentar el emprendimiento. Desde el Gobierno central, a través de organismos como el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), dependiente del Ministerio de Economía y Competitividad, que va a movilizar este año en torno a 1.600 millones de euros para financiar proyectos de I+D+i, con un incremento presupuestario del 22% con respecto a 2014. Se trata de un viejo conocido del sector empresarial innovador, que ha financiado en 38 años proyectos de I+ D+ i de más de 12.000 empresas españolas, mo-
vilizando un total de 20.000 millones de euros. Y a nivel andaluz, además de programas como Jeremie, hay iniciativas específicas con empresas de primer orden como Telefónica y su centro de crowdworking de la Isla de la Cartuja de Sevilla, denominado formalmente Andalucía Open Future. Una iniciativa público-privada a la que se han adherido las diez universidades públicas andaluzas, con una inversión de 8,9 millones de euros.
Sin embargo, respecto a las opciones de acceso al crédito para las empresas innovadoras, el expresidente de la patronal tecnológica Eticom, Adolfo Borrero, también critica que «en Andalucía no existe una cultura de capital semilla para ayudar a empresas en desarrollo, y en capital riesgo hay algunas operaciones, pero son muy pocas todavía».
En este sentido, Borrero destaca el papel de las aceleradoras de empresas como Bolt, de la que también es director. «Las aceleradoras dan alas a las startups», ya que «tanto el apoyo económico como el técnico es imprescindible para que el talento florezca en forma de empresas», afirma.
Este trampolín para emprendedores con sede en Málaga acaba de lanzar su cuarta edición de proyectos para empresas jóvenes, con un total de 12 seleccionadas de entre más de 600 candidatos de todas las partes del mundo y en el que «hemos conseguido levantar 6 millones de euros», apunta el directivo.
En Bolt Accelerator las startups están asesoradas por un centenar de mentores de éxito internacional, además de estar vinculadas con grandes compañías internacionales como Amazon, Microsoft o PayPal, con las que la aceleradora malagueña tiene acuerdos, lo que la convierte un referente respecto a otra aceleradoras. En los tres años que lleva en funcionamiento, Bolt ha acelerado a 87 empresas, de las que la mitad son andaluzas.