Una inyección ‘extra’ para acelerar el ritmo

La ejecución de fondos Next Generation se está concentrando en 2022 y 2023, con el foco en la digitalización y la innovación

Las estadísticas de gasto en innovación de los próximos años estarán determinados por un hecho extraordinario que difícilmente se repetirá. En 2022 y 2023 se concentra una parte relevante de las inversiones de los fondos Next Generation, diseñados por la UE para impulsar la recuperación económica tras la pandemia. Andalucía ha activado numerosas iniciativas gracias a estas partidas, desde la renovación de la autopista A92 con el asfalto sostenible Masai (diseñado por la Universidad de Granada), hasta la culminación del centro CEUS para el desarrollo y el ensayo de aviones no tripulados en la base del INTA en el Arenosillo. También se está estudiando cómo se pueden aplicar estos fondos a otras iniciativas estratégicas, como el acelerador de partículas de Granada (IFMIF – Dones).

Según el análisis que han realizado Cotec y el Ivie, a la comunidad autónoma se le han asignado en torno a 6.543 millones, de los cuales un 25% han podido ser destinados a la transformación del tejido económico con ayudas para la digitalización y la investigación. Aunque la mayoría del gasto ha sido canalizado directamente por el Estado, la Junta, de manera directa, ha licitado 159 millones de euros en contratos para I+D+i y ha concedido casi 190 millones en forma de subvenciones. Entre los programas que se han impulsado está el denominado ‘Investigo’, dotado con 40 millones y destinado a apoyar la contratación de jóvenes investigadores en entorno empresariales.

Algunos sectores estratégicos, como el aeronáutico, el almacenamiento de energía, la agroalimentación o la digitalización del ciclo integral del agua, tienen una incidencia particular en el sur de España. Tanto a través del programa Moves como del denominado Pioneros, se han impulsado algunas de las primeras grandes inversiones en infraestructuras asociadas al hidrógeno verde en Andalucía. También se ha realizado una inversión relevante en el despliegue de redes 5G y el desarrollo de nuevas aplicaciones asociadas a esta tecnología.

Para los próximos años queda un doble objetivo. El primero será aprovechar al máximo las partidas que ya se están ejecutando, tratando de dar la máxima continuidad a los proyectos que se han emprendido en todos los ámbitos. El segundo será reforzar el presupuesto de I+D+i para mantener el pulso inversor de este periodo, lo cual exige el máximo aprovechamiento del nuevo marco de fondos Feder (de los que Andalucía sigue siendo la mayor perceptora en España).

A ANDALUCÍA YA SE LE HAN ASIGNADO MÁS DE 6.000 MILLONES, DE LOS QUE EL 25% ESTÁN DESTINADOS A LA TRANSFORMACIÓN DEL TEJIDO PRODUCTIVO