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«Al pedir una subvención me pregunto: ¿me apoyas o me complicas la existencia?»
PAOLA HURTADO DOCTORA EN BIOTECNOLOGÍA
Tras pasar por varias universidades, ahora trabaja con Universal DX en un test que permita detectar el cáncer.
—¿Cómo definiría la relación actual entre la Academia y la empresa privada?
—Desde dentro de la Academia parece que se llevan a cabo muchos proyectos, pero cuando te pones en los zapatos de una empresa y piensas en cómo llevar al mercado algo del laboratorio ves situaciones disfuncionales.
—¿La buena relación se rompe al materializar en la empresa una idea gestada en la universidad?
—No termina de haber mecanismos eficientes para que, por ejemplo, patentes interesantes de un grupo de investigación se transfieran a la empresa. Hay personas maravillosas trabajando en ello, pero a la hora de implementarlo en la empresa llegan las trabas burocráticas.
—¿Cómo solucionamos esto?
—Los mayores obstáculos son de índole contractual, de financiación o vinculados a la propiedad intelectual. El camino es arduo porque se trata de algo estructural. Tiene que haber un compromiso por parte de los gobiernos para impulsar esa transferencia. Es arriesgado, pero se entrega muchísimo dinero en subvenciones a muchas cosas. También se debería entregar a iniciativas punteras que, por la naturaleza de estos negocios, necesitan periodos de desarrollo largo para poder empezar a facturar. Entiendo que debe haber un control de las subvenciones, pero se debería apoyar más al desarrollo de empresas e iniciativas: es lo que genera riqueza en el territorio. A veces me pregunto, ¿me estás apoyando o me estás complicando la existencia? ¿Todas las empresas y proyectos van a salir adelante? ¡Claro que no! Como muchas otras cosas a las que se les pone dinero, pero cuanto más apoyo hay en un sector más frutos se recogen. Hay que darle una vuelta a los mecanismos de ayuda para que el dinero llegue y no se dejen morir proyectos que tienen muchas posibilidades pero que necesitan de un capital.
—¿Cómo es la calidad del tejido investigador andaluz?
—Bastante buena. No hace justicia la calidad de las publicaciones con respecto a lo que, posteriormente, se traslada a la empresa o al gran público. A veces se quedan en un cajón porque el proyecto se financiaba solo durante cuatro años y luego se quiere volver a pedir la ayuda pero las líneas que se financian ahora son otras. Es difícil vivir a golpe de proyecto. Nos pasaba que había investigaciones que no se podían continuar porque se había acabado el dinero.
—¿Se les da la visibilidad necesaria a los investigadores?
—Hay que visibilizar que se hace desde Andalucía y enseñar a otros referentes. Aquello que no se ve parece que no existe, pero existen muchos profesionales de la tecnología o la innovación trabajando desde el sur. Es importante visibilizarlos.
—¿Diría que el investigador andaluz se encuentra en un entorno competitivo?
—Cada vez hay más iniciativas, pero podría haber muchas más personas que tomaran el camino de la innovación y la investigación. Al igual que tiene que existir un mayor apoyo institucional para que se creen ‘startups’ y se innove en las empresas, también es importante que desde el sistema educativo se fomente el espíritu innovador y emprendedor.
—¿Considera que investigar desde Andalucía le aporta alguna ventaja o, por el contrario, le supone alguna barrera?
—Para brillar en la investigación y tener méritos propios es muy importante el grupo de investigación en el que te encuentres. Más que una cuestión de comunidad autónoma, quienes están en esos grupos tienen más oportunidades, un mayor acceso a contactos, más posibilidades de publicar en revistas de alto nivel o de participar de las redes internacionales en las que se encuentre. Más allá, también influye cuánto se mueva el investigador y aquello que vaya sembrando: la gente con ganas de hacer cosas también tiene que creerse que puede hacerlas. Muchas veces los andaluces pecamos de humildad, pero hay gente haciendo cosas maravillosas aquí.
«NO SE PUEDEN DEJAR MORIR PROYECTOS QUE TIENEN POSIBILIDADES POR FALTA DE RECURSOS»