Tras la explosión de Paramos (Tui) Luz verde a la reconstrucción de viviendas fuera de ordenación
La incorporación de una disposición adicional en la Ley del Suelo permitirá darle encaje legal a la reconstrucción de las viviendas afectadas tras la explosión de la pirotecnia clandestina en Paramos, que en el momento del accidente estaban fuera de ordenación. La decisión entronca con una petición que el Ayuntamiento de Tui presentó a la Xunta para garantizar que a todas las viviendas existentes previas a la explosión del 23 de mayo se les podrá dar licencia para su reconstrucción. El visto bueno a la solicitud fue comunicado ayer por el alcalde de Tui, Carlos Vázquez Padín, a los vecinos que acudieron a la reunión que se celebró en el Centro Cultural de Guillarei. Una comparecencia en la que estuvo acompañado por el gerente urbanístico de la catástrofe, Rubén Vázquez. Esta disposición adicional está pensada para zonas declaradas gravemente afectadas por una emergencia de protección civil por el Consejo de Ministros. En ese sentido, el regidor manifestó que «fue una modificación legislativa conseguida desde Tui, que puso en marcha la Xunta, que entrará en vigor el 1 de enero para circunstancias excepcionales como esta».
Durante el encuentro, el alcalde también trasladó a los vecinos la respuesta a las cartas que envió al Gobierno central urgiendo el inicio del desescombro, en la que indica que «recibirá contestación en breve». «Por lo menos queda claro que son conscientes que tienen un problema sobre la mesa, un problema sin resolver en Tui», afirmó el alcalde, que confió en que el gobierno se ponga con esta labor a través de un «encargo de gestión, que es el planteamiento jurídico que permite que en circunstancias excepcionales» se pueda «adjudicar a una empresa pública este tipo de obras». Una vez que se tome la decisión, los trabajos podrían comenzar en el plazo de un mes y ejecutarse en tres meses.
La explosión de este polvorín ilegal, escondido en plena aldea, dejó el pasado mes de mayo una pareja muerta, dos niños huérfanos y 37 heridos. Además, son alrededor de 700 personas las afectadas por los daños que la fuerte deflagración provocó en sus viviendas. Las que se encontraban en la zona cero de la explosión quedaron totalmente destruidas. En el resto, más alejadas del epicentro, los daños también fueron muy cuantiosos.