Tras el retraso inicial en la entrega de dosis, defiende el «esfuerzo enorme» por ampliar el suministro. «Habrá dos mil millones a final de año
Cuando parecía que la farmacéutica Pfizer se quedaba sin patentes de fármacos superventas, llegó la pandemia. En menos de un año, esta compañía en colaboración con BioNTech, desarrolló la primera vacuna contra el nuevo coronavirus que autorizó la Unión Europea. Las primeras dosis fueron recibidas como un maná, pero la llegada con cuentagotas, los retrasos y la falta de transparencia en la negociación han tensado el pulso de Europa con los gigantes farmacéuticos. El presidente de Pfizer España, Sergio Rodríguez, accede a explicar a través de un cuestionario esta «guerra por las vacunas».
—¿Está satisfecho de cómo se está haciendo la vacunación en España? —Creo que hay que poner las cosas en perspectiva y que hemos logrado un hito histórico al conseguir vacunar 10 meses después de que aparecieran los primeros casos en España. Nunca ha habido una campaña dirigida a vacunar a todos los habitantes de todo el mundo. Creo que hay que llamar la atención sobre el hecho, por ejemplo, de que, en la Unión Europea, todos los países hayan iniciado la vacunación a la vez. También destacar que hasta la fecha hemos entregado más de 1.7 millones de dosis en España.
—El Ministerio de Sanidad ha atribuido todos los retrasos a la incapacidad de las farmacéuticas.
—Creo que en Pfizer estamos haciendo un esfuerzo enorme para intentar ampliar el suministro. Hemos explorado formas innovadoras de aumentar la cantidad de dosis que podemos suministrar este año, y ahora creemos que potencialmente podemos administrar aproximadamente 2.000 millones de dosis para fines de 2021. En este sentido, hemos realizado ciertas modificaciones en los procesos de producción en las instalaciones de Puurs (Bélgica) de Pfizer que facilitarán la ampliación de las capacidades de fabricación en Europa y se suministrarán más dosis de vacunas en el segundo trimestre. Ya estamos cumpliendo con las entregas y aumentaremos el suministro a partir de la semana del 15 de febrero. —¿Ha perdido la industria una oportunidad de oro para ofrecer la vacuna a un precio simbólico y mejorar su imagen?
—Hemos desarrollado un marco que establece los precios en función del volumen de dosis que compre un país, en función de los acuerdos y de la capacidad de financiación para garantizar el acceso equitativo a la vacuna para todos los países. Es importante señalar que la inversión en el desarrollo y fabricación de la vacuna se ha autofinanciado en su totalidad, y ya hemos invertido miles de millones de dólares. —Las compañías han negociado en cada país un precio diferente y con contratos que no son públicos. Esto sucede con otros fármacos, pero en pandemia, ¿el procedimiento no debería ser más transparente? —Nuestra prioridad era desarrollar una vacuna de la manera más rápida y segura posible para tratar de ayudar a encontrar soluciones durante esta pandemia. Con respecto a la publicación de los contratos, muchos gobiernos han pedido que los acuerdos sigan siendo confidenciales. Los miembros del Parlamento Europeo le preguntaron a nuestro CEO, Albert Bourla, que por qué los contratos no son públicos. Su respuesta fue que los eurodiputados deben ser conscientes de que tenemos negociaciones en curso con gobiernos de todo el mundo sobre el acceso a la vacuna, por lo que cualquier contrato que se haga público tendría que respetar los acuerdos de confidencialidad con los gobiernos.
—¿Los países que más han pagado son los que han recibido más dosis y más rápido la vacuna?
—No, eso no es así. Hemos trabajado para entregar vacunas según los acuerdos que tenemos con todos y cada uno de los países. Trabajamos activamente con gobiernos de todo el mundo, así como con socios globales de salud hacia un acceso justo y equitativo a las vacunas Covid-19.
—¿Por qué Estados Unidos o Emiratos no tienen problemas de suministro
«Muchos gobiernos han pedido que los acuerdos de compra de las vacunas sean confidenciales»
Seis dosis «Dejar una dosis adicional en cada vial que podría usarse para proteger no sería razonable»
y a Europa las vacunas llegan con cuentagotas?
—Yo no le puedo hablar de otras compañías, pero en nuestro caso nuestro compromiso sigue estando en identificar formas para aumentar el suministro de nuestra vacuna, incluyendo, como ya se ha anunciado, ampliar nuestra capacidad en las plantas de producción y colaborar con más proveedores en nuestra cadena de suministro. En este sentido, el trabajo que realizamos en nuestra planta de Puurs, que es la que distribuye la vacuna en Europa, se produjo una fluctuación en el suministro de una semana, en el caso de España, pero gracias al trabajo que estamos realizando, ya se ha podido retomar el programa original de suministro a la Unión Europea.
—¿Es cierto que su compañía presionó para cambiar la ficha técnica de su vacuna y poder aprovechar una sexta dosis ?
—Los estudios se realizaron con cinco dosis, por lo que, cuando solicitamos la autorización de uso de emergencia o la autorización condicional en Europa, todavía no teníamos datos para validar las seis dosis. Nuestra intención con este cambio de ficha técnica es aportar claridad a los profesionales sanitarios, minimizar el desperdicio de vacunas, y tener un mayor número de dosis.
—¿No es tramposo cobrar por dosis en lugar de por viales?
—Dejar una dosis adicional en cada vial, que podría usarse para vacunar a más personas, no sería razonable. Nuestros acuerdos con los gobiernos siempre se han basado en la entrega de dosis, no en viales.