Don Felipe
todos los ciudadanos». Al acto, que no se celebró en el Hemiciclo sino en el Salón de los Pasos Perdidos, asistieron las autoridades del Estado, vicepresidentes del Gobierno, el líder de la oposición, los miembros de la Mesa del Congreso y portavoces de los grupos parlamentarios. No acudieron ERC, Bildu, Junts, PDCat, BNG y CUP porque dicen que quieren acabar con «el régimen del 78».
La presidenta de la Cámara Baja, Meritxell Batet, abrió el acto advirtiendo de que «los riesgos para la democracia hoy,para nuestra democracia y la del resto de países libres, son otros; pero existen y no son desde luego de menor magnitud».
Ante la mirada de Iglesias, que no aplaudió su discurso, señaló como ejemplo de esos peligros « la deslegitimación y la instrumentalización de las propias instituciones democráticas», así como «la creciente polarización de la política», el «populismo de las respuestas fáciles» o «el miedo y la negativa a enfrentarse a la complejidad». Y siguiendo este hilo subrayó que si bien todos ellos «son antiguos», «pueden reconocerse sin problema en nuestra realidad actual». Junto a este mensaje de advertencia, Batet ensalzó la calidad de la democracia española tras el debate abierto por Iglesias. «Con la exitosa superación de los retos de la transición (la sociedad española), ha dado a luz una democracia reconocida en el mundo y plenamente integrada en la comunidad internacional de los estados libres», subrayó.
La presidenta de la Cámara Baja también envió un mensaje al indepen«Hay que proteger la democracia porque su erosión pone en cuestión los derechos y libertades»
dentismo al señalar que «todo es discutible y toda reforma puede plantearse, pero ante ataques y amenazas que pretendan romper con el sistema no hay más respuesta que la activación de las facultades constitucionales para garantizar o restablecer el respeto del pacto fundamental vigente».
Sin embargo, y pese a la defensa de la independencia de las instituciones incluida en su discurso, la bancada socialista tumbaba varias iniciativas presentadas por los grupos conservadores en este mismo sentido, apenas media hora antes de que Batet iniciara su discurso. María Jesús Moro (PP), José María Sánchez García (Vox) y Miguel Gutiérrez (Ciudadanos) reclamaron sin éxito en la Comisión Constitucional que la Cámara Baja instase al Gobierno a legislar con respeto a las instancias democráticas, a terminar con el abuso de los reales decretos leyes y a defender la libertad de prensa frente a los ataques perpetrados por el vicepresidente Pablo Iglesias. En las tres proposiciones no de ley, el PSOE y Podemos unieron sus votos a los de sus socios independentistas para impedir que prosperaran estas iniciativas del centro-derecha, informa Juan Casillas.
A su llegada, el Rey fue fuertemente ovacionado por los ciudadanos que se encontraban ante el Congreso. Al terminar el acto se dirigió al Salón de Plenos para contemplar los tiros de la intentona golpista que aún se conservan en la bóveda. Lo hizo acompañado del jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, el líder de la oposición, Pablo Casado, entre otros, bajo las explicaciones del ponente constitucional, Miquel Roca.