La Comisión Europea intenta salvar la libre circulación
▶ Bruselas tiene alergia a cualquier medida que pueda volver a restablecer fronteras
La Comisión Europea tiene como objetivo preservar a toda costa la libre circulación dentro de la UE y por ello ayer envió una reprimenda a seis países (Alemania, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Suecia y Hungría) por aplicar restricciones excesivas en las fronteras con medidas que van más allá de las recomendaciones acordadas por la propia Unión Europea para limitar la expansión de las infecciones por covid-19. Todos los países tienen que responder con sus razones en un plazo de diez días.
El Ejecutivo comunitario insiste en sus recomendaciones que limitar la libre circulación en las fronteras nacionales tiene muchos efectos contraproducentes para la continuidad de la actividad económica y pocos beneficios para la lucha contra la pandemia. Para Bruselas, el mejor criterio sogue siendo el de permitir los viajes entre regiones que están en una misma situación epidemiológica, y aplicar medidas como cuarentenas y test PCR en los casos en los que se viaje de una zona muy contaminada a otra que lo está menos.
Los seis países contra los que se ha dirigido la Comisión habrían abusado de sus prerrogativas aplicando restricciones rigurosas e incluso « prohibiciones para entrar o abandonar el país», lo que incluso afecta a los derechos individuales.
«La Comisión Europea ha sido clara: tenemos un enfoque coordinado, hay riesgo de fragmentación y de distorsiones a la libre circulación y a las cadenas de suministro, algo que por desgracia ya hemos visto en las pasadas semanas», añadió el portavoz de la Comisión para justificar la necesidad de enviar esta carta de apercibimiento.
Amenaza de sanción
Los comisarios de Justicia, Didier Reynders, e Interior, Ylva Johansson, ya habían enviado la semana pasada otra carta a todos los países, los 27, advirtiendo de que se estaba preparando este trámite que es el primer paso para abrir un expediente sancionador. En esa carta les recordaban a todos los países las recomendaciones que consensuaron en el Consejo Europeo de cara a armonizar las restricciones a la libertad de movimientos por la pandemia en todo el espacio Schengen. En concreto, los países de la Unión Europea acordaron a finales de enero que los los gobiernos nacionales pudieran aplicar restricciones de viaje selectivas a los territorios cuya incidencia acumulada durante 14 días superase el umbral de 500 casos por cada 100.000 habitantes.
La Comisión confía en que será posible «encontrar soluciones sin necesidad de adoptar pasos legales». Las nuevas cartas de apercibimiento que fueron enviadas el lunes recuerdan la necesidad de que las medidas que adopten los países para controlar el movimiento de ciudadanos deben ser «no discriminatorias y proporcionadas».