La compra de vivienda roza niveles pre-Covid por el boom de los chalés
▶ En febrero se cerraron 40.482 transacciones, 1.500 menos que en el mismo mes de 2020
Hace justo un año el sector inmobiliario entró en colapso. Las compraventas descendieron al mínimo por el confinamiento, y algunos expertos vaticinaron una crisis duradera con bajadas de precios de incluso dos dígitos. Las perspectivas, sin embargo, se estabilizaron con el paso de los meses y hoy la vivienda es de los pocos sectores que ha recuperado constantes vitales.
Según los datos publicados ayer por el Colegio de Registradores, en febrero se cerraron 40.482 compraventas de vivienda. La cifra supone apenas 1.500 operaciones menos (un 3,7%) que en febrero de 2020, justo el mes previo al estallido de la pandemia en España y al establecimiento del estado de alarma. Los registradores destacaron ayer la mejora de la estadística respecto a enero, cuando las compraventas de viviendas cerraron con una caída del 15,5% anual.
La mejora del mercado producida en los últimos meses no se debe al comportamiento de las grandes ciudades, sino que tiene un aroma rural. «Aunque las capitales siguen llevando el peso en toda España se empieza a preferir las compraventas en zonas alejadas o limítrofes a las capitales», detalla en declaraciones a este periódico el vicedecano del Colegio de Registradores de la Propiedad, Miguel Tabarés, que pone en valor el impacto que está teniendo el teletrabajo en el mercado inmobiliario.
La obligación de trabajar desde casa impuesta a miles de españoles ha añadido atractivo a las viviendas unifamiliares, más fáciles de encontrar en zonas rurales. Una tendencia que provocó que en 2020 el peso de las compraventas de unifamiliares respecto a los pisos alcanzara máximos históricos: el 20,5%.
Los expertos consideran que a la buena salud de las zonas del interior se unirá en los próximos meses una reactivación de otras regiones. Es decir, que los números de febrero no son una excepción y, a grandes rasgos, el ladrillo enfila ya la salida de la crisis originada por el Covid-19.
«Las previsiones en el sector inmobiliario van muy ligadas, como no puede ser de otra manera, a la evolución de la economía en general, dependiendo siempre de las posibles nuevas olas de la pandemia, de la efectividad y el ritmo de vacunación, así como de los avances de la tasa de paro en este ejercicio o de la aplicación de nuevas leyes en el sector», explica el director de estudios de pisos.com, Ferran Font.
La recuperación, eso sí, no será completa. La normalidad tardará un poco más en llegar en las comunidades más dependientes del turismo, como son Baleares, Canarias y la Comunidad Valenciana, además de grandes capitales, como Madrid y Barcelona. Todos estos mercados siguen acusando la falta de un comprador extranjero que en zonas como el archipiélago balear representa el 30% del total de operaciones para el sector inmobiliario.
Compras al contado
Pese a la pérdida de peso del comprador extranjero, las compras al contado se mantienen al alza. La estadística publicada ayer por el Colegio de Registradores refleja que el mercado hipotecario sigue sumido en una profunda crisis, que le llevó a registrar una caída de los contratos del 12,8% durante el mes de febrero.
Según los registradores, más del 25% de las viviendas vendidas durante este mes lo hicieron sin necesidad de un crédito hipotecario. Un porcentaje condicionado por la debibilidad del mercado laboral y el incremento de las restricciones producido a principios de año. A pesar de esta tendencia, los registradores aseguran que esta diferencia entre compraventas y constitución de hipotecas sobre vivienda obedece a un hecho puntual y creen que no tendrán mucho recorrido.