Su rostro impedirá que le den un crédito
▶ Los especialistas advierten de las graves deficiencias que pueden llevar a estos sistemas a limitar derechos fundamentales y monitorizar a la población en base a patrones estandarizados
Imagine que se encuentra en una entrevista de trabajo y, de golpe y porrazo, el encargado de recursos humanos le dice que no es apto para el puesto que solicita porque un ‘software’ ha determinado que no cumple con los requisitos. O que se dirige al banco a solicitar un préstamo y una máquina dispone que, por sus rasgos y comportamiento, encaja en el perfil de un moroso. Los sistemas de reconocimiento facial, capaces de categorizar a una persona según esos rasgos, llevan años figurando entre los principales problemas éticos a los que hace frente la tecnología. Y, según su implantación va creciendo, también lo hace la preocupación de los expertos por sus posibles usos lesivos.
Recientemente, un grupo compuesto por más de 70 académicos, juristas y personalidades del ámbito tecnológico han enviado una carta al Gobierno solicitando una moratoria en el uso de estos sistemas. Su objetivo es que un comité independiente realice un estudio de sus potenciales usos perjudiciales y de los errores que ha cometido hasta la fecha actual. En concreto, los expertos señalan que estos sistemas pueden asociar a una persona a un patrón erróneo, ya que, «más allá de correlaciones estadísticas», no hay
Cómo funciona el reconocimiento facial
modelos científicos aceptados que indiquen que un tipo de nariz, un rictus o una manera de andar sean predictores adecuados de comportamientos individuales futuros.
Por el contrario, destacan que esta tecnología aún tiene «graves deficiencias», fomenta las «clasificaciones racistas, clasistas y/o sexistas» y que, en algunas partes del mundo, su empleo está limitando derechos fundamentales. «Estamos viendo que el reconocimiento facial se está empleando, en algunos casos, para monitorizar a la población; especialmente en lugares donde no hay derechos reconocidos», dice a ABC Ofelia Tejerina, abogada, presidenta de la Asociación de Internautas y firmante de la misiva.
El reconocimiento facial no es nuevo. Es una tecnología que se lleva desarrollando desde hace más de una década. Gracias a ella muchos usuarios son capaces de desbloquear sus móviles o realizar pagos sin necesidad de ingresar ningún código numérico o patrón.
Seguridad en aeropuertos
También se está empleando para mejorar la seguridad en aeropuertos en tiempos de pandemia. Por ejemplo, el aeródromo Adolfo Suárez Madrid-Barajas cuenta con un piloto de esta tecnología que está pensado para agilizar el embarque de pasajeros. La detección biométrica de cada usuario se realiza con dispositivos tipo tablet.
En otros países, como Reino Unido, se está implementando notablemente su uso con el objetivo de perseguir la criminalidad. Sin embargo es China el estado que está apostando con más fuerza por su desarrollo. En el país asiático los dispositivos de reconocimiento facial se cuentan por millones y se pueden encontrar en aeropuertos, centros comerciales, oficinas y calles. Recientemente varias empresas tecnológicas del país han pedido la patente para aplicaciones que pueden detectar y vigilar a los miembros de la minoría china uigur, musulmana y perseguida por el régimen comunista.
En la carta enviada por los expertos al Gobierno, se llama la atención directamente sobre el reciente intento de Renfe de instalar sistemas de reconocimiento facial en el transporte. La ferroviaria abrió un concurso público por 700.000 euros para contratar un sistema de vigilancia capaz de detectar usuarios sin mascarilla y controlar el aforo. Sin embargo, también debía permitir identificar el género, la etnia o incluso el estado emocional de los usuarios con el fin de prevenir conflictos. La posibilidad de que estos sistemas creen sesgos, y se utilicen para catalogar a una persona como conflictiva, «simplemente porque otros que se le parecen lo son», preocupa a los expertos. «Estos sistemas detectan un patrón, no exactamente todos los detalles de tu cara, sino el patrón que cumplen tus rasgos. Preocupan mucho las decisiones jurídicas que se pue