La gran empresa española prevé una aceleración del crecimiento

▶ Botín, Álvarez-Pallete e Isla piden usar los fondos de la UE para hacer más reformas José María Álvarez-Pallete

La subida del precio de la luz también marcó el cara a cara entre el número dos del PP, Teodoro García Egea, y la vicepresidenta tercera y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. La ministra de Unidas Podemos se defendió de los ataques lanzados por García Egea y que cuestionaban la efectividad de su «escudo social» marcando distancia con este sector. «A mí nunca me van a ver en una eléctrica», se defendió, criticando además que, «en esto, en el PP son expertos».

En su opinión, la situación que vivimos actualmente responde a «dos problemas»: «el oligopolio» en el sector eléctrico y «las puertas giratorias».

Ante las críticas de García Egea, que acusó al Gobierno de ser «el más caro de la historia», Díaz reconoció que «es un problema gravísimo para millones de familias» y que «el Gobierno está comprometido en abaratarla». Solo mencionó, sin embargo, el recorte de los llamados ‘beneficios caídos del cielo’, mientras obvió la propuesta de Unidas Podemos de poner en marcha una eléctrica estatal, proyecto para el que ya está trabajando en su regulación. Cabe recordar que los impuestos suponen un 21,4% del total de la factura de la luz de los hogares.

El IVA que soporta el recibo de la luz en España está actualmente fijado en un 21%, uno de los más altos de la UE. Por ejemplo, es más bajo en países como Portugal (que lo recortó del 23% al 6%), Grecia (6%), el Reino Unido (5%) Italia (10%), Irlanda (13,5%), Luxemburgo (8%) y Francia (5,5%), según datos oficiales de la Comisión Europea.

Sin embargo, el Ejecutivo se ha negado en varias ocasiones a rebajar el IVA y se escuda en que no tiene competencia para ejecutar dicha bajada. La ministra de Hacienda y portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, se justificó hace unas semanas al decir que Bruselas había llamado la atención a España «por el abuso del IVA reducido».

A pesar de esta excusa, la Comisión Europea ha reiterado que los Estados miembros sí tienen margen para bajar el IVA en algunos sectores energéticos como el de la electricidad y el del gas natural.

Por otra parte, la posible suspensión del impuesto del 7% a la generación eléctrica que soportan las compañías generadoras no es una medida nueva, ya que en octubre de 2018 el Gobierno lo rebajó al 0% durante seis meses (hasta marzo de 2019) ante el fuerte incremento que sufrieron los precios de la electricidad en agosto y septiembre de ese mismo año.

Optimismo ante las previsiones de crecimiento y cabeza fría para aprovechar las oportunidades que se abren para la economía española. Este es el mensaje que lanza la gran empresa española para la etapa pos-Covid, un periodo en el que nuestro país, con el empuje de los fondos europeos cuyo primer tramo se aprobó ayer, debe saber transformar y modernizar su sistema productivo. Las oportunidad está, y el tirón en el crecimiento que se espera para los próximos meses será superior a las previsiones. «España se sale del mapa», resumió gráficamente la presidenta ejecutiva del Banco Santander, Ana Botín, que participó ayer junto al presidente de Inditex, Pablo Isla, y el de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, en un coloquio en el marco de la reunión anual del Círculo de Economía.

Moderados por el vicepresidente de la entidad y CEO de Puig, Marc Puig, los tres coincidieron en lanzar un mensaje de optimismo. Es lo que se espera siempre de los ejecutivos de empresas de su tamaño, pero lo sustentaron en previsiones más concretas. Así, Ana Botín consideró que España rebasará la previsión de crecimiento de entre el 6 y 7% actuales para alcanzar el 8% o incluso un 9%, aunque lo relevante, añadió, es a qué nivel se crecerá el próximo año y si, en su conjunto, la economía mundial superará la que es ahora su principal amenaza, la inflación. La máxima ejecutiva del Santander sí apuntó que la recuperación en todo caso será muy desigual, con China y Estados Unidos tirando por delante y Europa rezagada.

Ana Botín

En la misma línea, el presidente de Telefónica coincidió con Botín en dar por superada la previsión de crecimiento del 6%. «Las estimaciones se van a quedar cortas», apuntó Álvarez-Pallete convencido en que hay una relación directa entre aceleración del crecimiento y ritmo de vacunación, que es lo que «marca el ritmo de confianza». Ahí, recordó el presidente de Telefónica, los meses de pandemia han sido un mazazo, pero también han servido para acumular una ahorro ahora disponible que cifró en un 6% del PIB.

Sobre las palabras de Botín y Álvarez-Pallete, el presidente de Inditex Pablo Isla corroboró la impresión de que el PIB crecerá más de lo previsto,

Presidenta de Banco Santander

Presidente de Telefónica y de que España tiene una gran oportunidad con la aportación de los fondos europeos para la recuperación. Aunque recordó que España supo y ha sabido aprovechar en su momento los fondos de cohesión de la UE, Isla señaló el riesgo de caer en cierta «autocomplacencia» y no acometer las reformas en el campo de la economía, pero también en el de la educación, necesarias para hacer de España un país más competitivo. «Tenemos que hacer los deberes», resumió.

Álvarez-Pallete quiso abundar en esta idea, a la vez que mostraba su confianza en la capacidad española para saber aprovechar una oportunidad única. «España va a recibir en los próximos siete años tantos fondos europeos como en los anteriores 27 años», apuntó el presidente de Telefónica, un caudal de ayudas que, proporcionalmente, es superior al que recibió Alemania con el Plan Marshall. Con perspectiva histórica, Botín comparó el momento actual con otros momentos trascendentes para la economía española, como los Pactos de la Moncloa en la Transición o la incorporación de España al espacio común europeo.

«Es clave que cada euro que invirtamos tenga un efecto multiplicador», añadió Botín, convencida también de que una recuperación solida pasa por hacer a la vez reformas estructurales, entre las que citó por ejemplo una reestructuración fiscal que pase porque «todos paguen lo que tengan que pagar», apuntó en alusión a las plataformas de internet. En la misma dirección, Álvarez-Pallete reclamó modernizar un «sistema regulatorio anclado en el siglo pasado», que piensa en «términos analógicos frente a la realidad digital» y que hace que la competición sea desigual.

«España se sale del mapa» y rebasará las previsiones hasta el 8% o, incluso, el 9%

En cualquier caso, la recuperación que venga se producirá sobre la devastación que ha provocado la pandemia del Covid, una crisis que, a la vez, ha servido para acelerar procesos que ya estaban en marcha, como el de la digitalización, lo que ha impactado de lleno sobre las empresas cuyos ejecutivos se reunieron ayer en Barcelona. «Uno de los cambios fundamentales ha sido la aceleración del canal online. Hemos avanzado en un año lo que teníamos previsto en tres», apuntó Isla.

«El Covid ha sido como un catalizador, como si fuese una máquina del tiempo» que nos ha situado hasta tres años por delante, añadió el presidente de Telefónica, que destacó como clave la pérdida del miedo de la gente, obligada a la fuerza por el confinamiento, a «comprar o a formarse por internet». «Hay una aceleración exponencial de lo que ya vivíamos», se sumó Botín recordando por ejemplo que en 2020 el 80% los productos del Santander en el Reino Unido ya se comercializaron de manera digital. «La empresa española en su conjunto ha estado a la altura en un momento muy difícil», zanjó el presidente de Inditex en el mismo tono optimista que sus colegas de coloquio. Representando sus empresas el 25% de capitalización bursátil del Ibex, a los tres ejecutivos se les escuchó con atención.

Señaló el riesgo de caer en cierta «autocomplacencia» y no acometer reformas