«Ximo Puig obedece a Sánchez y aplaude la salida de prisión de los que imponen los países catalanes»
▶ El aspirante popular a presidir la Generalitat Valenciana alerta del independentismo que él «frenó» en Alicante
Carlos Mazón será elegido presidente del PP en la Comunidad Valenciana el 3 de julio en el congreso regional, tras haber arrasado en las primarias con un 95% de los votos. Al frente de la Diputación de Alicante se ha convertido en la apuesta de Pablo Casado para disputar la Generalitat Valenciana al tripartito de izquierdas liderado por Ximo Puig.
—La Convención Nacional del PP se celebrará en Valencia y usted se perfila como una baza para seguir la estela de Isabel Díaz Ayuso en las urnas y dar proyección a Pablo Casado a escala nacional. ¿Tan importante es la Comunidad Valenciana para llegar a la Moncloa?
—Nosotros tenemos la convicción de que la Comunidad Valenciana no tiene ni el peso, ni la fuerza, ni la influencia que debería tener y afortunadamente en el Partido Popular este tema lo tenemos resuelto y una gran prueba es que el relanzamiento del partido hacia La Moncloa pasa por la Generalitat Valenciana. Además, estamos hablando del final de un proceso, porque la convención va a tener lugar en varias ciudades de España, pero su final o su puesta de largo va a ser aquí y yo creo que eso demuestra muy claramente que no es solo un símbolo, sino una decisión firme demostrando claramente su importancia para el PP. Desgraciadamente, no la tiene para Ximo Puig y Pedro Sánchez. —¿Cómo aprovecha Puig un Gobierno del PSOE para toda España? ¿Le escuchan en sus demandas? —Hagamos un repaso de las respuestas en los últimos encuentros del presidente de la Generalitat con los ministros y Pedro Sánchez. Con la ministra Ribera, que el trasvase del Tajo al Segura es una barbaridad, y él se calla; con Montero, la mejora de la financiación para la Comunidad no toca; Miquel Iceta es el único que ha recibido con agrado su propuesta del Estado federal y la Commonwealth, que es un sistema colonial que dependería de Barcelona. Claro, eso significaría que allí mandarían más y eso sí le gusta. Su compañero Ábalos le cambia la agenda y le amenaza con montarle un lío si no va a aplaudirle en una visita a Valencia. Y la última, con la ministra de Sanidad, ha tenido un no por respuesta a su petición de quitarnos las mascarillas para ir a las playas. ¿Podremos tener un presidente que venga con algún resultado cuando habla con sus compañeros de Madrid? En cambio, yo no tengo que ir a Madrid, este jueves estuvo aquí el secretario general del PP, Teodoro García Egea, y explicó cómo se había presentado una propuesta en el Congreso para no modificar las reglas del trasvase TajoSegura y anunció que la financiación será justa con esta comunidad cuando gobierne Pablo Casado.
—¿Esos agravios y otros pasarán factura en las urnas?
—Lo último que le ha dicho Pedro Sánchez a Ximo Puig es: tienes que salir a aplaudir los indultos y él, que es muy obediente con su compañero de partido y su jefe de filas, ha aplaudido los indultos para quienes quieren los ‘países catalanes’. No creo que haya ya ninguna duda sobre el ninguneo del Gobierno de España a la Comunidad Valenciana con el aplauso sonrojante del socialismo valenciano.
—Habla de la propuesta federal de Puig y de ese catalanismo por los indultos. ¿Hay relación entre ambos? —Se está importando ya el proceso de imposición lingüística que lleva a cabo Compromís, un partido catalanista e independentista, con el impulso de Puig aprovechando la pandemia para aplicar los planes de centro educativo incluso en las zonas que son exclusivamente castellanohablantes. Y es una copia del modelo catalán, ya no son simples declaraciones aplaudiendo indultos, sino la ejecución de un programa predeterminado, trabajado y que se va a seguir implantando en nuestra Comunidad si no lo paramos. —Prefiere referirse a «refuerzo» en su partido más que renovación, y usted tiene buena relación con Toni Cantó. ¿Es un activo en su equipo? —Ha sido muy buen activo para Isabel Díaz Ayuso apoyándola en su campaña. Me congratula mucho coincidir con él en su diagnóstico de lo que está ocurriendo en la Comunidad Valenciana. He compartido pactos de gobierno de PP y Ciudadanos con Toni Cantó en la Diputación y el Ayuntamiento de Alicante para ser dique de contención de la imposición catalanista que quiere dividir a la gente aquí. Seguro que si se lo pedimos, nos echará una mano.
«Ha sido una polémica artificial agitada por a quienes no les gusta el Partido Popular, más que un debate interno»
«Un muy buen activo en Madrid, coincido en su diagnóstico de aquí y seguro que si lo pedimos, nos echará una mano»
—¿Pero ha habido ese contacto ya? —La verdad, no hemos hablado últimamente. Está en Madrid y creo que está viniendo muy bien: cuantas más manos, mejor.
—¿Qué opina de las declaraciones de Díaz Ayuso sobre los indultos y el papel del Rey al firmarlos?
—Todo el mundo sabe lo que Ayuso quería decir. Son otros los que están pretendiendo ponernos a todos en un brete. Ha sido una polémica más artificial que real –independientemente de la manera de decir las cosas– agitada por a quienes no les gusta Díaz Ayuso ni el Partido Popular, más que un debate interno nuestro. —Gobernando en dos de las tres autonomías más pobladas –Andalucía y Madrid– y dejando aparte Cataluña por el factor nacionalista, la Comunidad Valenciana es el siguiente objetivo del PP. ¿Cómo va a apoyarle la dirección nacional en la proyección de las siglas para las elecciones? —Defendiendo los intereses de Alicante, Castellón y Valencia de manera prioritaria. A nivel orgánico, los primeros congresos tanto provincial como regional, Pablo Casado los ha fijado aquí. —¿Cuál sería su primera medida como presidente de la Generalitat? —Un plan de choque serio por el empleo juvenil, porque es dramático un paro del 40%.