Alumnos denuncian que las copias eran insuficientes o se entregaron por defecto en catalán
Faltaron copias de exámenes en castellano en la Selectividad de Cataluña pese a la orden judicial ▶ «En la mayoría de los tribunales se ha incumplido el auto del TSJC»
La Selectividad catalana, celebrada entre los días 8 y 11 de junio, debía, por orden del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), garantizar el derecho a los alumnos a examinarse y tener el enunciado de las pruebas en la lengua que escogieran, de las tres cooficiales en la comunidad (catalán, castellano o aranés). El auto suspendía una parte de la normativa autonómica vigente que avalaba el reparto «por defecto» de todos los exámenes en catalán e instaba a dar un trato igualitario a los tres idiomas. Instaba, igualmente, al presidente y al secretario del Consejo Interuniversitario de Cataluña (CIC) a que «disponga lo necesario para la ejecución de lo acordado».
Según relatan varios examinados eso no fue así. Los alumnos, que realizaron las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU) en tribunales distintos, dan fe con su testimonio de que «el número de copias en castellano siguió siendo insuficiente en algunos casos», lo que, según apuntan, obligó a los profesores a ir en busca de copias a otra aula o fotocopiar el examen demorando así la entrega del folleto a los examinados, «perjudicándoles con respecto a los que pidieron los cuestionarios en catalán». Esa era una de las situaciones «discriminatorias» que el auto debía impedir a tenor de la denuncia de la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB) que, tal y como avanzó ABC el día 4 de junio, propició la orden judicial.
A falta de los datos definitivos sobre las incidencias registradas en la convocatoria de junio de las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU), la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB) ya ha elevado al Tribunal Superior de Justicia de la Generalitat (TSJC) un escrito en el que deja constancia de las «irregularidades detectadas en el proceso». La AEB pedía que se «impriman los enunciados en las tres lenguas y que el alumno los tenga disponibles sea cual sea la opción lingüística que escoja». Eso no ocurrió «en la mayoría de tribunales», según denuncia la entidad. Ana Losada, presidenta de la AEB, afirma en declaraciones a ABC que «se ha seguido discriminando a aquellos estudiantes que optan por examinarse en castellano». «Lo único que han cumplido es colgar el cartel informando que pueden realizar las PAU en las tres lenguas», añade. La entidad confía en que «en la convocatoria de septiembre los enunciados de los exámenes estén redactados en las tres lenguas y los alumnos puedan responder en la que deseen».
Alice, compañera de instituto de Alexandra, se examinó en la misma Facultad, aunque en diferente aula. Da fe de que los cuestionarios en castellano «los trajeron contados». «El día anterior preguntaron quién quería los exámenes en esta lengua y trajeron los justos. Si se hubieran apuntado algunos el mismo día no habrían bastado», señala la estudiante. Alice defiende también la instrucción de la justicia catalana. «Debía hacerse algo porque antes se forzaba a los alumnos a realizar la Selectividad en una lengua que no es la suya y les iba peor», asegura esta joven, que quiere cursar estudios de Comunicación Audiovisual.
También Pablo Rosal, que se examinó en la Escuela Gimbernat de Enfermería de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) asegura que hubo déficit de impresos en castellano. En su caso, la pregunta que le lanzaron al iniciar las pruebas fue: «¿Estás de acuerdo en recibir todos los enunciados en catalán excepto los de los exámenes de lengua?». La pregunta, según denuncia la AEB, también vulneró el dictado del TSJC, al anteponer el catalán a las otras lenguas. En el caso que él relata hubo déficit de cuestionarios en español en la prueba de Física.
«Entregaron los exámenes en catalán por defecto», asegura, justo lo que prohíbe la orden del tribunal catalán. Pablo, que quiere cursar estudios de Ingeniería Civil en la Universidad Politécnica de Catalunya (UPC), considera «necesario y justo» que los alumnos de selectividad tengan garantizado el derecho a acceder a los anunciados en las tres lenguas.