La mayoría de los contagios están vinculados con la tripulación de barcos mercantes
Identificados hasta 25 casos de la variante Delta en las áreas sanitarias de La Coruña y Vigo ▶ Cribados por las fiestas de fin de curso y los viajes
La Xunta, de la mano de su comité clínico, considera que se da la situación idónea para propiciar estos avances como parte de su desescalada. Con 1.269 casos activos en el balance del Sergas difundido ayer, la incidencia a 7 días apenas rebasa los 20 casos por 100 mil habitantes, y a 14 días está en el entorno de los 40 (a grandes rasgos, la mitad de la media española). Se suman una de las menores ocupaciones hospitalarias por Covid (0,62%) y la cuarta parte de ocupación de UCI frente a la media nacional (1,74 vs 7,2%), amén de la segunda tasa de positividad más baja del país (1,9%, menos de la mitad de la media). Además, en torno al 43% de los gallegos tienen la pauta completa de la vacuna contra del coronavirus, y casi el 63% tiene, al menos, una dosis.
Eso sí, Feijóo recordó que hay una serie de condicionantes que obligan a mantener la cautela. «Queda el final del túnel, pero aún no salimos del túnel». Por un lado, la variante Delta. También preocupa el área sanitaria coruñesa, donde la IA supera los 70 casos en los últimos 14 días. El foco se pone en esta gerencia y en los jóvenes, los últimos en ser inmunizados. A las fiestas de fin de curso, que ya dejan varios brotes, se sumaban anoche las hogueras de San Juan, circunscritas a la esfera privada. En paralelo, «cada vez menos gente» acude a los cribados, lamentó el mandatario.
«Tenemos que seguir siendo responsables y cautos, no estropear todo el trabajo hecho en estos largos y oscuros meses», reclamó. Una cautela que se percibe en el tratamiento de la retirada de la mascarilla en exteriores, que Feijóo dio a conocer, entre críticas al Gobierno, sin aguardar a que Sanidad se decidiera a dar alguna pista. Medida de protección que seguirá presente en conciertos, eventos deportivos y espacios con aglomeraciones; y en concellos (si los hubiere) con más de 500 de IA. «En interior, máscara y distancia. En exterior, máscara o distancia». Feijóo comenzó a machacar ayer un eslogan que apela al ‘sentidiño’ para no malograr la desescalada en su recta final. «La variante Delta nos debe preocupar» según expuso ayer un integrante del comité clínico que dirige la salida del atolladero pandémico en Galicia. Y es que, aunque en la Comunidad la cepa británica siga siendo la mayoritaria —a mucha distancia de otras detectadas como la sudafricana, la colombiana, la brasileña o la neoyorquina— los primeros casos de la variante Delta proveniente de la India empiezan a despuntar. Por el momento, y tal y como anotó ayer el presidente de la Xunta en la rueda de prensa en la que dio cuenta de las conclusiones del comité, son 25 los casos identificados en Galicia en los últimos días, la mayoría vinculados a mercantes que llegaron a puerto, y todos ellos distribuidos entre las áreas sanitarias de La Coruña y la de Vigo.
«Está aislada con brotes concretos», manifestó Alberto Núñez Feijóo para exponer que si en este caso «perdiésemos el control», estaríamos ante un problema «mayor» porque el riesgo de contagio en el caso de esta variante es «muy superior» al de la variante británica y, además, afecta a las personas que solo han sido vacunadas con una dosis y aún no cuentan con la pauta completa. «No tenemos vacunas para todos, no hay vacunas suficientes para asegurar que en julio, ni siquiera en agosto, se dispensen dosis al cien por cien de la población», reflexionó el mandatario sobre la premura de inmunizar al completo al mayor número de ciudadanos posibles. En este plano, Feijóo pidió no perder de vista la situación de países como Reino Unido o de la ciudad lusa de Lisboa, donde los positivos
El Área Sanitaria de Pontevedra y O Salnés convocó a 510 estudiantes a cribados voluntarios para detectar posibles casos de Covid-19 entre asintomáticos tras los contagios registrados a causa de viajes de fin de curso y fiestas de graduación entre alumnado de Bachillerato. A ellos se dirigen ahora la mayor parte de las advertencias. Feijóo hizo hincapié ayer en que los «más vulnerables» ya no son los mayores, sino los de menor edad, «como consecuencia de la falta de vacunas para todos», recordó el presidente. van en aumento pese al alto porcentaje de ciudadanos protegidos con un primer suero, insuficiente para frenar esta nueva variante.
Por lo de pronto, dos anuncios importantes en la encarnizada lucha contra el Covid. Por un lado, Galicia ha puesto en marcha ya la campaña para acabar de vacunar a los inyectados con AstraZeneca en la semana 11 y no en la 12 como marcaba la ficha técnica del antídoto. Se trata de apurar los tiempos para finiquitar el mayor número de inmunizaciones posibles, sobre todo teniendo en cuenta que este suero le fue inoculado a personas de entre 60 y 69 años, un colectivo bastante expuesto al virus y más ante el avance imparable de la variante india. El segundo de los anuncios de calado, es que en la primera semana de julio se iniciará con toda probabilidad la campaña de vacunación del grupo de 39 a 30 años, las edades con las que más se están cebando los contagios a día de hoy. Solo cabe recordar que de los trece ingresados en UCI a día de hoy, al menos tres son menores de 40 años.
Sin perder de vista el aumento de casos vinculados a las fiestas de fin de curso, y las reuniones que tendrá lugar durante los meses de verano, Feijóo lanzó un mensaje a todos los no vacunados: «Queda el final del túnel, pero aún no salimos de él y sería una lástima estropear el trabajo del último año y medio».