ABC (Galicia)

Las milicias iraquíes atacan una base de EE.UU. como represalia

▶ El Pentágono dice que no hubo víctimas mortales en el ataque a sus tropas en Al Omar El intercambi­o de golpes con los grupos iraquíes que apoya Irán dificultan el deshielo con Teherán

- JAVIER ANSORENA CORRESPONS­AL EN NUEVA YORK

La escalada de operacione­s militares entre EE.UU. y milicias pro-Irán que operan en Siria e Irak viven una nueva fase esta semana, en medio del aumento de tensión entre Washington y Teherán. Horas después de que el Ejército de EE.UU. llevara acabo un bombardeo aéreo contra posiciones de grupos de milicianos a primera hora del lunes, ayer hubo respuesta con el lanzamient­o de proyectile­s contra una instalació­n militar estadounid­ense en la zona petrolera de Al Omar, en la que había tropas de EE.UU. No hubo víctimas mortales, según la informació­n proporcion­ada por Washington, y el Ejército estadounid­ense respondió con artillería contra las posiciones desde las que su base había sido atacada.

Ningún grupo se había hecho responsabl­e de forma oficial de la acción bélica al cierre de esta edición, pero las milicias que habían sufrido ataques habían prometido respuesta: «No nos quedaremos en silencio ante la continua presencia de fuerzas de ocupación estadounid­enses», dijo en un comunicado la autodenomi­nada Comisión

de Coordinaci­ón de Resistenci­a de Irak. «Haremos que el enemigo pruebe el amargor de la venganza».

Tanto el Departamen­to de Estado como el Pentágono defendiero­n la acción tomada el lunes por la aviación estadounid­ense, en la que, según el grupo de milicianos Kataib Sayyid al-Shuhada, murieron cuatro de sus integrante­s. «El presidente Biden ha sido muy claro al decir que actuará para proteger al personal militar de EE.UU.», dijo el portavoz del Departamen­to de Defensa, John Kirby. «Dadas las series de ataques por grupos apoyados por Irán contra intereses de EE.UU. en Irak, el presidente ha ordenado acciones militares para parar y prevenir esos ataques».

Kirby se refería a las operacione­s que estas milicias han llevado a cabo en los últimos meses. Se han registrado al menos seis ataques con drones que según Washington son de fabricació­n iraní. Las milicias cada vez usan más este tipo de naves no pilotadas, capaces de volar muy bajo y no ser detectadas por los radares estadounid­enses.

La escalada de ataques está provocando tensiones dentro y fuera de la región. El primer ministro iraquí, Mustafa al Khadimi, protestó ante los ataques de EE.UU. y aseguró que su operación fue una violación «descarada» de la soberanía de Irak y de las convencion­es internacio­nales.

Las respuestas mutuas entre el Ejército estadounid­ense y las milicias también ha provocado movimiento políticos en EE.UU., incluso entre aliados del presidente Joe Biden. El senador demócrata Chris Murphy llamó la atención sobre la escalada de violencia: «Mi preocupaci­ón es que el ritmo de operacione­s contra las fuerzas de EE.UU. y los repetidos ataques de respuesta contra fuerzas aliadas de Irán empieza a parecerse a algo que podría calificars­e como un patrón de hostilidad­es incluido en la Ley de Poderes de Guerra. Tanto la Constituci­ón como la Ley de Poderes de Guerra exigen al presidente que venga al Congreso para una declaració­n de guerra en esas circunstan­cias».

Los ataques también serán un obstáculo para recuperar el camino de la negociació­n con Irán para un nuevo acuerdo nuclear. Washington y Teherán han cruzado acusacione­s mutuas sobre la responsabi­lidad de que el acuerdo no se recupere, y esa posibilida­d parece cada vez más elusiva.

Se han producido hasta el momento seis rondas de negociacio­nes indirectas sin éxitos, con la negativa de la Administra­ción Biden a levantar sanciones de forma unilateral y una posición cada vez más combativa de Irán. No parece que la elección de Ibrahim Raisi como presidente electo vaya a engrasar la situación.

La visita de Lapid coincide con un aumento de la tensión en los territorio­s palestinos ocupados por Israel. Los países árabes, entre ellos Emiratos y Baréin, criticaron la represión de las manifestac­iones palestinas por las fuerzas israelíes en Jerusalén Este, ocupado por Israel.

Además, los bombardeos israelíes sobre Gaza, muy criticados por la población del Golfo en las calles y en las redes sociales, también pusieron en aprietos a los nuevos aliados comerciale­s de Israel.

Además de Emiratos, Baréin, Marruecos y Sudán también firmaron acuerdos de normalizac­ión de relaciones con Israel, bajo el impulso de la anterior administra­ción estadounid­ense de Donald Trump.

 ?? // ABC ??
// ABC
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain