Los niños con Covid pueden tener mayor riesgo de desarrollar diabetes a los 30 días
▶ Un informe de los CDC avisa de la necesidad de que los menores se vacunen para evitar enfermedades crónicas
«muchos más, pero menos graves».
Si durante el curso 2020-21 que un alumno diera positivo era casi «excepcional», con la llegada de Ómicron se ha convertido en la norma, expone Vicent Mañes, presidente de la Federación de Asociaciones de Directores de Centros Educativos Públicos de Infantil y Primaria.
Una situación límite que ha llegado, entre otros, al Colegio Internacional Torrequebrada, de Málaga. Su subdirector, David Jones, indica que diez de sus 50 profesores –el 20% del personal– estuvieron de baja o en cuarentena durante la semana pasada, y de sus 730 alumnos, hasta 80 se ausentaron por el mismo motivo; algo «nunca visto» en su centro. Tras la Navidad se realizó un cribado masivo en que se detectó uno o dos contagios por cada curso. «Ha sido muy complicado», resume Jones, cuyo centro ha recurrido a una bolsa flotante de docentes que asegura la sustitución de este personal.
Positivos continuos
Ayer mismo, el CEIP Soledad Sainz de Colmenar Viejo, en Madrid, comunicó a los padres la cuarentena de toda la clase de Infantil de 3 años. Desde Colmenar su directora, Arancha CañedoArgüelles, contrasta que el año pasado se confinaron «dos aulas en todo el curso lectivo», y con Ómicron ya llevan «una en una semana». «Los positivos están siendo continuos», sentencia la también coordinadora Covid del centro. Teresa Dublan, maestra del centro, ha visto cómo sus alumnos «se contagian mucho más», aunque de levedad.
La vuelta de Navidad fue punto de inflexión también en el Agora International School de Madrid. «Caímos dos entre el profesorado», expone el director académico. Allí, una enfermera que trabaja a tiempo completo se encarga de comunicar cada día a la comunidad educativa los positivos, para luego expresarlo a los empleados y padres, que se tienen que adaptar a la nueva situación en espacio de horas. Los chats de padres arden. «Aunque Ómicron es mucho más contagiosa, por suerte estamos bien», explican desde este centro de 500 alumnos, que ha observado la mayor incidencia entre adolescentes.
A su vez, en el valenciano colegio Mas Camarena, su directora, Maite Marín, explica que alrededor de un 15% de los alumnos de Infantil y Primaria ya son positivos. En cuanto al personal, del centro casi un 30% se encuentra de baja por tener la enfermedad. «Ahora mismo las dos enfermeras están de baja, una porque tiene Covid y la otra porque su hija está confinada», resalta.
El último informe de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC) advierte de un aumento del riesgo de diabetes entre los menores de 18 años que han padecido Covid-19, sin importar la gravedad de la enfermedad. El documento constata que las personas menores de 18 años con coronavirus tenían más probabilidades de ser diagnosticadas de diabetes a los treinta días después de la infección que aquellas que no habían sufrido el virus o que las que habían padecido otras infecciones respiratorias agudas prepandémicas.
¿Significa eso que el Covid-19 puede convertirse en un factor de riesgo para la diabetes? Es la pregunta que se hacen los autores del informe estadounidense, al tiempo que subrayan la importancia que tiene seguir las «estrategias de prevención ante el coronavirus en este grupo de edad, incluida la vacunación». Los autores observaron que los niños que estaban infectados con Covid tenían entre un 30% y un 166% más probabilidades de desarrollar diabetes tipo 1 o tipo 2 al menos un mes después de la infección que los no infectados.
Más de 500.000 personas
Los resultados obtenidos tras analizar la información de dos bases de datos de aseguradoras médicas de EE.UU., que incluyen a más de 500.000 personas, respaldan dos hechos que ya se conocen sobre la relación entre el Covid y la diabetes: para niños y adultos, que el virus puede empeorar los síntomas de la diabetes; y, además, que las personas con diabetes tienen un mayor riesgo de infección grave por Covid.
Según afirma en nuestro país el presidente de la Sociedad Española de Diabetes (SED), Antonio Pérez, «se trata de un estudio observacional y la asociación no significa causalidad». Por lo tanto, desafortunadamente, «no es posible sacar conclusiones definitivas sin más investigación sobre por qué los niños con Covid desarrollan con mayor frecuencia diabetes».
Del mismo parecer es Santiago Conde
Barreiro, coordinador del Grupo de Diabetes de la Sociedad Española de Endocrinología Pediátrica (SEEP). «El estudio tiene aún limitaciones y no afirma que el Covid sea la causa de un aumento en los casos de diabetes en niños». No obstante, tal y como asegura este médico de Atención Primaria de Barbastro (Huesca), sí han «tenido la sensación de que había más casos de diabetes tipo 1 a raíz del Covid-19», aunque, afirma, no se ha podido «medir» directamente su impacto.
El problema es que en España no hay registros nacionales epidemiológicos que permitan hacer un estudio similar a éste. «Los hay locales, pero también son imperfectos», añade Conde. Los diagnósticos de casos de diabetes, explica, son muy variables en el tiempo: «Siempre tenemos subidas y bajadas cada año. A veces se dan 2 o 3 años seguidos con más casos, pero no se pueden asociar a un problema concreto. Con el Covid lo vimos y lo hemos intentado medir entre varios compañeros del grupo de trabajo, pero no tenemos conclusiones claras de que hayan aumentado por esa razón».
En España, afirma el doctor Conde, «lo único que sí podemos confirmar es que cuando hemos estudiado los casos en un estudio en el que han participado los hospitales de Madrid, Valencia, Aragón y Andalucía, hemos visto durante la época pandémica más casos de cetoacidosis (una complicación de la diabetes), probablemente porque se han consultado más tarde».
En cuanto a cómo se puede atribuir la diabetes al Covid, los investigadores de los CDC postulan que el virus podría atacar directamente las células del páncreas que expresan receptores llamados enzima convertidora de angiotensina 2 (ACE2), que son parte del mecanismo que protege al cuerpo contra la diabetes. El virus SARS-CoV-2 utiliza células ACE2 en todo el cuerpo como punto de entrada para la infección. Otro contribuyente potencial podría ser la hiperglucemia por estrés como resultado de la tormenta de citoquinas que se observa en la infección, o podría ser el resultado de cambios más generales en el metabolismo de la glucosa causados por la infección.
Debido a que el estudio muestra que los niños con Covid tienen un riesgo bastante mayor de desarrollar diabetes que los que no lo han tenido, más del doble, el médico de la SEEP considera que los datos «son una buena pista y hay que ver si se sigue cumpliendo». Sin embargo, agrega: «Si esto se cumple, es posible que después de estas oleadas, con muchos niños contagiados, veamos más casos de diabetes en la población infantil en unos años».
LAS CLAVES DEL ESTUDIO