Madrid, capital mundial durante 48 horas con la vista puesta en Ucrania
La 32ª Cumbre de la OTAN convertirá a Madrid durante 48 horas en la capital mundial: del martes a las 15.30, cuando el Air Force One del presidente estadounidense Joe Biden aterrice en la base militar de Torrejón de Ardoz, al jueves a la misma hora, cuando comiencen a despegar los aviones oficiales de las delegaciones.
La historia de la organización de la cumbre está colmada de paradojas. El anfitrión es un presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que cuando andaba en la oposición pregonaba con facilidad que suprimiría el Ministerio de Defensa en desenfadadas entrevistas.
Sus socios de coalición (Podemos y con ministros comunistas dentro la ‘matrioshka’ del partido) han manifestado abiertamente su oposición a la cita de la Alianza Atlántica y provocado tensiones en el Gobierno por ello. Hasta un secretario de Estado agita la manifestación que tiene lugar hoy.
Y se celebra en una ciudad –Madrid– con la cual el Gobierno ha tenido sus más y sus menos (políticos) en el pasado reciente.
Además, y he aquí el dramático imprevisto, la cumbre se organiza en unas circunstancias de guerra en Europa para las cuales no estaba pensada cuando España inició el camino de su organización en el año del 40º aniversario de nuestra adhesión: los objetivos finales serán otros (la invasión de Ucrania lo cambia todo) y el frente oriental recobra todo el peso de la OTAN.
Tanto es así que hasta Finlandia y Suecia (repitamos... ¡Finlandia y Suecia!) pueden salir de Madrid con el paso expedito para convertirse en pocos meses en los países 31º y 32º de la Alianza Atlántica.
La guerra de Putin lo ha cambiado tanto todo que, por ejemplo, en la cita de Madrid los aliados se habían conjurado hace un año para elegir a la primera mujer como secretaria general en sustitución del noruego Jens Stoltenberg, en el cargo desde el 1 de octubre de 2014. Finalmente, esa posibilidad se retrasa al menos un año.
Más allá de estas ideas preliminares, la Cumbre de Madrid tendrá estas cuestiones principales:
41 jefes de Estado o Gobierno De Islandia a Australia, de Malta a Corea
A los 30 líderes de los países de la Alianza Atlántica se sumarán los de otros países como Suecia y Finlandia –que han iniciado ya formalmente su proceso de adhesión–, Australia, Corea del Sur, Japón y Nueva Zelanda –con la preocupación del Pacífico y el desafío chino sobre la mesa en una de las reuniones– o de países de la UE que no están en la OTAN como Austria, Chipre, Irlanda y Malta.
Estos últimos fueron invitados ya que se abordará una mayor coordinación y relación de defensa con la UE, sobre todo ante las amenazas del Sur. Los presidentes del Consejo Europeo, Charles Michel, la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el Alto Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrel, participan.
También asistirá el presidente de Georgia y, por videollamada al menos, el de Ucrania, Volodímir Zelenski. En el runrún previo a la Cumbre está una posible participación del ucraniano ‘in situ’ aunque hasta el último momento no se decidirá. «Por ahora se descarta», dicen fuentes oficiales sobre el asunto.
El gran ausente por razones obvias y que puede condicionar el discurrir de la cita será el ruso Vladímir Putin.
De la disuasión al flanco Sur
La OTAN señala seis asuntos clave que se tratarán en las reuniones de la Cumbre de Madrid:
1. Reforzar la disuasión y la defensa a largo plazo de la OTAN (todo ello con la mirada puesta en la amenaza de Rusia y el «desafío creciente» de China).
2. Medidas para mantener el apoyo a Ucrania.
3. El lanzamiento del nuevo Concepto Estratégico de la OTAN.
4. Reforzar las relaciones con otros países y mantener lo que se conoce como ‘puerta abierta’ a la Alianza (es decir, el futuro de nuevas adhesiones como Finlandia y Suecia). La asociación con Japón, Corea del Sur, Australia y Nueva Zelanda también se inserta en este apartado.
5. Adaptarse a las amenazas y desafíos provenientes de cualquier dirección. En este punto está el interés español en que se tomen más en cuenta las amenazas provenientes del sur.
6. La unidad transatlántica y la solidaridad dentro de la Alianza. Tras el periodo de Trump, los aliados aprovecharán para mostrar una total unidad, sobre todo en el contexto actual. «Mientras nos enfrentamos a la situación de seguridad más grave en décadas, la Alianza está a la altura del desafío con unidad y determinación», expresan.
2% del PIB en Defensa Habrá anuncios para elevar presupuestos
Ya en la Cumbre de Cardiff 2014 se marcó el objetivo de invertir un 2% del PIB en Defensa. Por ejemplo, España está en penúltima posición con tan solo un 1,03% del PIB destinado a Defensa en 2021. Se espera que Pedro Sánchez anuncie una inversión adicional en torno a los 2.000-3.000 millones durante la Cumbre. Biden, como Obama o Trump, subrayará la necesi
▶La histórica cita contará con más de 40 mandatarios y 5.000 participantes entre miembros de delegaciones y prensa ▶La Alianza aprobará un nuevo concepto estratégico y reforzará el apoyo a Kiev y la relación con los países del Pacífico