«No me siento incómodo con Vox en función de lo que pactemos»
«Castilla y León no nos sirve de referencia, nuestro referente es Andalucía y Juanma Moreno»
Aragón es uno de los objetivos más deseados por el PP en las elecciones del 28 de mayo. Para reconquistar esta región, Feijóo ha puesto su confianza en Jorge Azcón, alcalde de Zaragoza, por quien la anterior dirección de Génova apostó para presidir el partido en su comunidad. Las cuentas de Azcón son tan simples como contundentes para justificar su optimismo: si hace cuatro años el centro-derecha rozó el Gobierno regional, ahora, en plena tendencia al alza del PP en toda España su victoria está mucho más cerca.
—Tito Berni ha irrumpido en la precampaña. ¿Qué efectos prevé?
—Lo que estamos conociendo habla mucho del nivel moral que hay dentro del Grupo Socialista. Todo aquel diputado que haya asistido a prostíbulos y haya consumido cocaína va a tener que dimitir.
—¿Puede ser la puntilla para el Gobierno de Sánchez?
—Estas cuestiones que son morales y que pueden tener implicaciones legales muy profundas desmontan una vez más el falso discurso de Sánchez. —¿Cómo afecta a Lambán este caso? —Exactamente igual que a todos y cada uno de los soldados de Sánchez. Está por ver cuál es la implicación de las administraciones aragonesas gobernadas por los socialistas en esa trama de corrupción. Hasta ahora solo conocemos un contrato, pero si salen más es evidente que a Lambán le va a afectar mucho más.
—Aragón es una de las regiones favoritas en Génova para pintarla de azul la noche del 28-M.
—Vamos a trabajar para que en Aragón se produzca el cambio. Ocho años de Gobierno socialista ya son suficientes. Hoy Aragón es la comunidad que tiene un peor tratamiento fiscal a aquellos que menos dinero ganan y recibimos la peor sanidad de toda España. —Si tienen la peor sanidad de España,
¿por qué no se ven manifestaciones como en Madrid?
—Pues habrá que preguntar a los sindicatos. ¿Por qué se manifiestan en Madrid cuando la lista de espera allí es de 65 días y en Aragón es de 151 días? Esa es la realidad.
—¿Cómo le convenció Feijóo para dejar la Alcaldía de Zaragoza?
—Me convencí yo mismo. Feijóo me dijo desde el principio que la decisión tenía que ser mía, para hacer en Aragón lo que hemos hecho en Zaragoza, donde ha habido un cambio palpable y visible.
—Feijóo ha dado una orden a todos los candidatos del PP: quiere mayorías «absolutamente indiscutibles» para evitar pactos con Vox.
—El objetivo es gobernar en solitario, eso lo sabemos todos. Las experiencias de gobiernos en coalición no son tan eficientes como un gobierno en solitario del PP.
—¿La fórmula de Castilla y León, con un ejecutivo de coalición, no sirve de referencia?
—No, yo aspiro a un gobierno del PP. Para mí la referencia es Juanma Moreno. El cambio que hemos tenido en Zaragoza ha sido real, a mejor, y es muy parecido a lo que ha ocurrido en Andalucía.
—Usted fue elegido alcalde con los votos de Ciudadanos y de Vox. ¿Cómo ha sido la experiencia?
—El Gobierno de coalición del PP y Ciudadanos en Zaragoza ha funcionado bien.
—Pero han necesitado los votos de Vox para aprobar los Presupuestos.
—Es verdad que hemos aprobado todos los Presupuestos con los votos de Vox. Es el documento más importante que cada año aprueba el Pleno municipal y no ha habido grandes discrepancias entre la mayoría del centro-derecha. Todos hemos sido conscientes de que la responsabilidad era acabar con el anterior gobierno del ayuntamiento.
—¿No se siente incómodo para pactar con Vox en el futuro entonces?
—Yo no me siento incómodo en función de lo que pactemos. Si Vox me pide que cambie la política de igualdad no me siento cómodo y no lo acuerdo con ellos. Sí me pongo de acuerdo con Vox para pactar los impuestos. Podemos tener posiciones coincidentes o distintas según el caso.
—¿Descarta una coalición con Vox en Aragón?
—Lo mejor que les puede ocurrir a los aragoneses es que haya un Gobierno en solitario del PP.
—No se escape.
—Se descarta que nuestro objetivo sea la coalición. Mi escenario es el de una mayoría suficiente.
—Podría necesitar al PAR también.
—Yo creo que el PAR ha entrado en un proceso autodestructivo en el que es prácticamente imposible que obtenga representación. Hoy los valores que hace años pudo defender, de centroderecha en lo ideológico y de aragonesismo en lo territorial, están en el PP.
—¿Cómo puede alterar el resultado la participación de Teruel Existe?
—La mayor parte de los que han votado a Teruel Existe antes votaban a formaciones de izquierda. Comparto algunas cosas, para empezar la defensa de Teruel. La apuesta más importante para la despoblación la ha hecho Feijóo. —Lambán es uno de los barones socialistas más críticos con el sanchismo. ¿Cómo le complica eso la campaña? —Los aragoneses no son tontos y conocen perfectamente a Lambán. Saben que dice una cosa y hace la contraria y no puede ser que la incoherencia tenga premio. De boquilla dice una cosa, pero a la hora de la verdad siempre vota con Sánchez.
—Usted fue elegido presidente del PP regional con Casado, y ahora con Feijóo será candidato autonómico. ¿Cómo ha cambiado el PP este año? —Feijóo tiene un conocimiento de la política autonómica mayor del que tenía la dirección anterior.
—¿Ahora se escucha más a los barones desde Génova?
—Yo siempre me he sentido escuchado, con Casado y con Feijóo. —Génova ha dado manos libres a los territorios para que hagan sus listas. ¿Debe tenerlas Feijóo también cuando haya que elaborar las candidaturas al Congreso y el Senado?
—Yo creo que Feijóo va a escuchar, estoy convencido. Va a dialogar, seguro. Habrá colaboración total para hacer listas.
—¿Le han pedido opinión desde la dirección nacional sobre el voto en la moción de censura de Vox?
—Sí, y la he dicho. Fue en una comida con Feijóo. Defendí la abstención y argumenté que esta moción era similar a la que Podemos puso a Rajoy y lo que hizo el PSOE fue abstenerse. Hay una similitud. En ambos casos querían atacar al partido que estaba en su espectro electoral. No vamos a hacerle el juego a Vox en ese sentido.
Gobierno socialista «Los aragoneses no son tontos y conocen a Lambán: de boquilla dice una cosa, pero siempre vota con Sánchez»