Las encuestas alientan la percepción del PPdeG de «un cambio de ciclo urbano»
▶Los sondeos, también los del partido, elevan sus expectativas en las ciudades de cara a las elecciones municipales
Amenos de tres meses de los comicios del 28-M, el PPdeG rezuma optimismo. Comenzando por su presidente, Alfonso Rueda. Durante el último comité ejecutivo, el pasado 20 de febrero, en el tramo en abierto se mostró convencido de que «se puede cambiar» el «ciclo de poder municipal en Galicia». Más recientemente, el pasado jueves, tras la reunión del Consello, trasladó su creencia de que los populares van a «tener un resultado sensiblemente mejor al del año 2019». Unas «expectativas» que, comentó, obedecen tanto a las «sensaciones que se nos transmiten» como a «encuestas que manejamos» y las que «se están haciendo públicas». Una mención a la demoscopia que no fue en vano: los últimos sondeos divulgados (elaborados por Sondaxe y Sigma Dos) han aupado las esperanzas del PPdeG de sacar mejor nota allí donde más se les resiste, en las ciudades. Ahí «la tendencia es al alza», valoraba el miércoles la secretaria general del partido, Paula Prado.
Atendiendo a esos últimos sondeos, el PP aspiraría a recuperar el gobierno de Ferrol, al lograr la mayoría absoluta, y se acercaría en Lugo, a falta de un concejal más. Resultados que no sorprenden, pues son las apuestas más firmes de los conservadores. Pero han surgido opciones que se barruntaban más complicadas, en Santiago y en La Coruña. En cuanto al resto, en Orense el voto se presenta tan fraccionado que el escenario, abocado a pactos, es tan incierto como abierto. En Vigo y Pontevedra, donde se da por descontado que continuarán al frente Abel Caballero y Miguel Anxo Fernández Lores, el objetivo, para el PPdeG, pasa por mejorar el bagaje cosechado hace cuatro años.
Entonces, admiten sin rodeos los populares incluso en público, y nunca lo han ocultado o suavizado, el resultado —con un cero de siete en las ciudades, y apenas la Diputación de Orense como consuelo— fue malo. Tanto que, no le dolieron prendas a Rueda a la hora de admitirlo el jueves, resulta «más sencillo de mejorar». «La coyuntura es otra y el escenario no tiene nada que ver», apuntan a ABC fuentes del PPdeG, a la hora de colocar sobre cada platillo de la balanza 2019 y 2023. Hoy, subrayan, perciben un «cambio de ciclo en el ámbito urbano» que redunda en mejores «expectativas». «Cada vez que hacemos una encuesta, sube» la tendencia de voto; «y sube en todas las ciudades»; incluso, apostillan, allí donde, teniendo el listón más alto, es más costosa la ganancia. Más aún. Revelan estas fuentes que las encuestas propias del PPdeG no solo coinciden con las que se publican en prensa, sino que, «en algún caso, incluso [éstas] tienen una tendencia inferior a las que nosotros manejamos». Las suyas son más prometedoras.
Bugallo y Rey, a la baja
Yendo caso por caso, en Santiago entienden que el electorado «ha dejado de confiar en [Xosé Sánchez] Bugallo», quien en 2019, gracias al «voto útil», para desalojar «a las Mareas», contó con una importante bolsa de apoyos de votantes populares. Ahora, parte de ese electorado, aprecian estas fuentes, «se desengañó, ve que es la vuelta al pasado, la decadencia, con un gobierno totalmente agotado»; que el alcalde malgastó su «segunda oportunidad», lo cual, a su vez, abre una inesperada para el candidato popular, Borja Verea, quien hace nueve días, en el Pabellón do Sar, prometía la mayoría absoluta.
En La Coruña, algún sondeo llega a colocar al PP con 12 escaños. Las fuentes populares consultadas creen que la gestión de Inés Rey no es vista con buenos ojos, «por muchos ministros que vayan». Los guiños del Gobierno a la socialista no han sido pocos: de la concesión de la sede de la agencia de la inteligencia artificial a la celebración de la cumbre hispano-alemana.
En Ferrol se impone la prudencia, después de que un puñado de votos frustraran a José Manuel Rey en 2019. La intensa labor desplegada en su territorio por Elena Candia da sus frutos y permite soñar no solo con la alcaldía de Lugo, sino también con el ente provincial. En la inercia optimista, Rueda no renuncia a ninguna Diputación y ha dicho que hasta la de Pontevedra es «posible». Provincia con un talón de Aquiles por excelencia: Vigo. Más allá de que los sondeos inviten a pensar en arañarle algún concejal a Caballero, las citadas fuentes del PPdeG apuntan a un segmento de vecinos agraviados a los que quieren seducir el 28 de mayo: «No todo el mundo está tan contento con lo que hace el gobierno municipal». Capitalizar ese malestar resultará clave.
Las bazas
En términos globales, ¿a qué atribuyen en el PPdeG la mejoría en sus expectativas? Las referidas fuentes desgranan un ramillete de factores. En primer lugar, a que «la marca está fuerte». En segundo, lo que «suma» tener al expresidente Alberto Núñez Feijóo en Madrid, más el «plus» que le ha dado su sucesor, Rueda, al recoger su testigo, lo que «ha generado un efecto multiplicador». Tercero: el bagaje estos cuatro años de los propios gobiernos urbanos, a los que achacan una «parálisis», sin modelos de ciudad ni grandes proyectos, lastrados en gran medida por el modelo de pactos y coaliciones; un caladero en el que pescar, pues aprecian que el electorado cada vez «valora más la estabilidad» y «la buena gestión».
Pero hay más. Revelan las fuentes populares que sus encuestas reflejan que un 20% votará en clave nacional. Creen que les beneficia por contar con el activo de Feijóo en Madrid y porque será precisamente en las urbes —es en pueblos y villas donde pesa de forma más decisiva, casi definitiva, la persona, el candidato— donde habrá más voto de castigo al PSOE, «en clave echar a [Pedro] Sánchez». Y, todavía como ingrediente adicional, más allá de las encuestas «hay un runrún que no sale de mucha gente que, silenciosamente, el día de las elecciones va a ir a las urnas a mostrar su descontento».
En el siempre difícil juego de equilibrios, lo último que quieren en el PPdeG es que su base «se confíe» y no vaya a votar el 28-M: «Queremos mantener tensionado al electorado». «No podemos dar ninguna ciudad por ganada por muy buenos que sean los sondeos», advierten. Pero el partido percibe que tiene el viento de cola. «El PP va a por todas en todas partes, incluidas las siete ciudades, va a cambiar mucho el panorama en mayo, ya veréis como sí», arengaba Rueda en el baño de masas del Sar.
Viento de cola para el 28-M Feijóo en Madrid, el «plus» de Rueda en la Xunta, el bagaje de la legislatura y un «runrún» en la calle, los activos a capitalizar