Carlos Herrera inicia la carrera para presidir la Federación
▶ El comunicador necesitará, como todos los candidatos, 21 avales de 143 para poder presentarse
En breve espacio de tiempo se han desarrollado los acontecimientos en cascada. La orden ministerial que regula el proceso electoral a todas las federaciones españolas, la propuesta de la Federación de Fútbol respecto a las fechas de los comicios del sustituto de Luis Rubiales y, ayer, el primer precandidato. Es Carlos Herrera, sobre quien se dudó en un primer momento por diversos motivos, pero quien ha confirmado en privado y en público que su intención es auténtica. El presentador estrella de Cope y columnista de ABC quiere presidir la Federación Española de Fútbol (RFEF).
La orden ministerial que muchos esperaban como un salvoconducto para refrescar el sistema clientelar que favorece la endogamia electoral se ha quedado en la mitad de la mitad. La política no ha regenerado el sistema, al decir de expertos consultados por ABC. El mayor cambio reside en que ahora cada miembro de la asamblea de la RFEF sólo puede avalar a un candidato, y no como antes que podían apoyar a varios.
La nueva norma ha modificado el reparto constituyente de la asamblea. De 140 participantes se pasa a 143. Forman parte de este órgano el presidente de la RFEF (el único miembro permanente, denominado nato en el reglamento federativo), los presidentes de las diecinueve federaciones de ámbito autonómico y los miembros electos de los estamentos de clubes, futbolistas, árbitros y entrenadores. Doce pertenecen al fútbol sala y tres al fútbol playa. 123 asambleístas serán electos por los distintos colectivos (que incluyen al fútbol femenino) y 19 serán elegidos por las federaciones autonómicas, que en condiciones normales serán los presidentes regionales.
Son dos procesos en uno. Primero se elige la composición de la asamblea (la fecha propuesta al Consejo Superior de Deportes es el 26 de abril), después se formalizan los candidatos que cuenten con los apoyos requeridos (21 avales) y posteriormente los 143 asambleístas escogen al presidente (el 24 de mayo). No hay candidatos oficiales hasta que no se constituye la asamblea general.
Los plazos del proceso electoral van muy ajustados con la Eurocopa, que se jugará en Alemania del 14 de junio al 14 de julio. Ya hay medios que apuntan que la Federación se ha saltado sus estatutos al iniciar ahora el proceso electoral. Y la propia RFEF no descarta alguna impugnación de Miguel Galán, quien ya buscó recientemente sin éxito la inhabilitación del presidente de la gestora, Pedro Rocha.
Esto podría implicar un conflicto con la selección española de fútbol, que estaría preparando primero y disputando la Eurocopa después si el camino hacia las elecciones se alarga por posibles alegaciones u objeciones. El seleccionador Luis de la Fuente y su equipo de colaboradores tienen contrato con la Federación hasta el 30 de junio, acuerdo que firmó Luis Rubiales antes del cisma con Jenni Hermoso que provocó su caída.
La selección en la Eurocopa
Durante la fase de grupos, en la que España se medirá con Croacia (15 junio), Italia (20 junio) y Albania (24 junio), el contrato con el técnico riojano estaría vigente. Pero a partir del cruce de octavos de final, el seleccionador estaría sin contrato laboral. Queda por ver si el presidente de la gestora tendría atribuciones para renovarlo, según fuentes federativas. En la selección femenina, Rocha nombró a Montse Tomé cuando Jorge Vilda no fue renovado en su cargo de seleccionador. Y otra incertidumbre por el camino: si Rocha se presenta a las elecciones, es obligatorio nombrar a otro presidente de la junta gestora.
Carlos Herrera encabeza con su exposición pública la lista de presidenciables. En la misma siguen asomando con fuerza el abogado Salvador Gomar, presidente de la Federación valenciana, y el exCEO del Banco Santander Rami Aboukhair, un ejecutivo al que apoya el presidente del Real Madrid Florentino Pérez. Otros nombres que han aparecido en los últimos tiempos son Javier Lozano, el exseleccionador de fútbol sala y actual presidente de su Liga (LNFS), y Eva Parera, exdiputada del Partido Popular en Cataluña e hija del exdirectivo del Barcelona Antón Parera. No ha dado señales de vida Emilio García Silvero, abogado gallego empleado de la FIFA al que promueve Javier Tebas. Y parecen haberse retirado de la carrera la exsecretaria de Estado Irene Lozano, y la exvicepresidente de la Federación y exdirectora general del Consejo Superior de Deportes (CSD) Ana Muñoz.
Carlos Herrera expuso ayer en ‘Marca’ las líneas de su proyecto. Quiere rodearse de leyendas del fútbol español, citó a Del Bosque, Íker Casillas o Fernando Torres. Pretende externalizar a los árbitros, con autonomía, pero orgánicamente dentro de la RFEF. Le gustaría colocar en el VAR a exjugadores y árbitros que no estén en activo. Devolver la Supercopa a España en un formato como el actual. Y su seleccionador sería Luis de la Fuente.
Tras un martes repleto de murmullos e incluso con diversos medios que lo daban por hecho, el Barcelona anunció finalmente el fichaje de Ricky Rubio hasta final de temporada. Tenía prisa el club catalán pues, mañana, se agotaba el plazo para inscribir a nuevos jugadores en la Euroliga (en la ACB no hay límite). Y esa es la principal razón por la que ayer se hizo oficial su vuelta al club catalán. Sin embargo, como reza el comunicado de los azulgranas, será el propio jugador el que decida cuándo volver a las canchas.
Rubio ha estado entrenado a las órdenes de Roger Grimau la última semana tras anunciar que estaba en la recta final de su recuperación por problemas de salud mental. Unos problemas que le impidieron acudir al Mundial del pasado verano con España (abandonó la concentración solo unos días antes de viajar a Indonesia) y que también le llevaron a finalizar su carrera en la NBA tras 12 temporadas. Desde entonces, el base se instaló en España para tratarse de sus problemas y, mientras, negoció la rescisión de su contrato con los Cleveland Cavaliers, la cual se hizo efectiva el 4 de enero. Mal trago aliviado cuando anunció que se unía a la rutina del Barça.
Pese a que su vuelta a las canchas es una incógnita, además de su condición física (no juega un partido oficial desde abril del año pasado), el fichaje de Rubio es una gran incorporación para el Barcelona. El movimiento también tiene muchos tintes emocionales, ya que el base ya defendió los colores azulgranas entre 2009 y 2011, tiempo en el que conquistó una ACB, dos Copas del Rey y la Euroliga.
MADRID
Sigue Carolina Marín (Huelva, 30 años) afinando los detalles para París 2024. Dice estar mentalmente preparada para conseguirlo y enfoca su mirada en los meses de junio y julio, para esa meta de ser tercera cabeza de serie (ahora es quinta). Su objetivo no lo esconde: ganar el oro. Después de las lesiones en las rodillas y una gripe a principio de año que acortó su calendario, vuelve a levantarse para ser una versión todavía más completa y ganadora que la anterior.
Prepara el camino pendiente de no recaer ni tener ninguna otra lesión y con más calidad, y menos horas, de entrenamiento. Con una preparación mental que cultiva cada semana con su psicóloga para recuperar la energía y la confianza en sí misma, la base de todos los éxitos. «Me he dado cuenta de que si confío en mí y hago mi mejor juego puedo ganar a cualquiera. Mi rival soy yo misma. Nunca me conformo con lo que ya he hecho. Voy a por el segundo oro en los Juegos», admitió la onubense en un encuentro con la prensa organizado por Banco Santander.
Su ausencia de Tokio 2020 por lesión le sirve de acicate. «Es como si me hubieran robado algo que quería mucho. Fue un traspié la lesión, pero eso es agua pasada. Cuando siento que me quitan algo lo intento convertir en una motivación», apunta. Y perfila esta nueva Carolina que volverá a los torneos en marzo (Open de Francia, en el pabellón de los Juegos), aunque no sabe si participará en el Open de Madrid, tan cerca del Europeo: «Tenemos que ser muy selectivos. He cambiado mucho y ahora soy mucho más atacante. Ahora las jugadas y los partidos son mucho más largos». Y mantiene su pelea psicológica con las rivales, esa «zona negra»: «En Río me metí en la cabeza de mis rivales, tenemos que seguir trabajando en esa línea», advierte, con el oro en la mirilla: «La Torre Eiffel ya la conozco. A París no voy de turista. Voy a intentar conseguir una segunda medalla olímpica».