Donald Trump sorprende al oponerse a un nuevo veto total al aborto en EE.UU.
▶ Propone que cada estado pueda decidir sin una ley federal que determine plazos
Donald Trump ha optado por quedarse en un punto medio dentro su partido al aclarar cuál es su posición política sobre el aborto en la campaña que culminará en las elecciones de noviembre de este año. El expresidente y candidato republicano ha anunciado este lunes 8 de abril que, a su entender, lo que debe prevalecer finalmente es el ‘status quo’ actual: que cada estado decida qué quiere hacer, sin una ley federal que determine los plazos legales.
Esto significa que ninguno de los dos candidatos, el hoy presidente Joe Biden en el bando demócrata y Trump en el republicano, defiende un veto total al aborto, como el que se ha aplicado en Texas o Luisiana. Frente a la propuesta de Trump de dejar la elección a los estados, el presidente Biden propone una ley federal que reinstaure los plazos de unas 22 semanas, vigentes hasta 2022.
Trump, ya en campaña electoral, aclaró su postura en un vídeo publicado en redes sociales. «Mi opinión es que ahora que tenemos el aborto desde un punto de vista legal donde todos lo querían, los estados determinarán mediante votación o legislación, o quizás ambos. Y lo que decidan debe ser la ley del país, en este caso, la ley de cada estado», afirmó el expresidente en el vídeo. Esto supone una división de Estados Unidos entre estados donde queda restringido el aborto, sobre todo en el sur y medio oeste, y otros estados donde está permitido como hace décadas, en ambas costas del país, con Nueva York y California al frente.
Hasta 2022, el aborto estaba permitido en EE.UU. hasta las 22 semanas, en virtud de la sentencia del Supremo de 1973 conocida como ‘Roe vs. Wade’. Tras su anulación, varios estados han aprobado leyes que limitan la interrupción del embarazo a casos de riesgo para la vida de la madre o inviabilidad del feto, o hasta las seis semanas de gestación.
División republicana
Los demócratas defienden una ley federal que reinstaure los plazos hasta las 22 semanas, pero para eso necesitarían una supermayoría en el Capitolio, que no tienen, y la presidencia, que se renueva en noviembre. Los republicanos están divididos, y hace unos días Trump había dicho a asesores y periodistas que un plazo de unas 15 o 16 semanas sería aceptable para él.
Finalmente, el republicano ha optado por mantener ocultas sus preferencias personales y ha defendido que los estados sean los que decidan, cada uno por su cuenta. Todos los referendos o elecciones mantenidos desde la decisión del Tribunal Supremo, en estados conservadores como Ohio o Kentucky, han ido por la vía de liberalizar el aborto o han dado más poder a los demócratas.