Las colillas asesinas
Una vez más algo tan pequeño como una simple colilla de cigarrillo desencadena un voraz incendio en el AmpurdánU de dimensiones aun no calculdasá ¿Por qué ocurren estas cosas? Simplemente porque en materia de circulación vial seguimos sin tomarnos en serio las que consideramos pequeñas infraccionesU que luego devienen en consecuencias trágicasá Y una de ellas es arrojar por la ventanilla la colilla del cigarrilloU que no deja de ser una extensión de la mala constumbre yU porqué no decirloU la falta de educación ciudadana de tirar la colilla al suelo de muchos fumadoresU para los que el cenicero que ponen en las puertas de los lugares de trabajoU es solo «el sitio alrededor donde se tiran las colillas»á Podrá parecer excesivoU pero pienso que todo aquel que arroja una colilla al sueloU andando o desde un vehículoU debería ser considerado como un incendiario en potencia y castigadoU ya que la educación que se le supone no es suficienteá He conocido a muchos fumadores que se consideran perseguidosU pero al mismo tiempoU sin son amigosU no tienen el más mínimo problema de estar a tu lado y decirte: ¿no te importa si fumo?U y si eres más considerado que élU te tragas su humoá Es el momento de dejar las consideraciones y tomar medidas enérgicas y si fuera necesario prohibir fumar en los coches y otros vehículos a conductores y pasajerosá Supone la misma o mayor distracción encender un cigarrillo que manejar el teléfono o buscar una dirección en el navegadorá Los conductores profesionales no deberían fumar mientras trabajanU pero nadie se preocupa por elloá