La Meca Trail
Las peripecias de un viaje para alcanzar r la meta de la concentración que BMW organiza en Garmisch-Partenkirchen, para las motos trail más grandes
Hace una semana estaba viajando por el norte de Europa para llegar a una de las concentraciones de los amantes de las motos de Trail más grandes, al menos de Europa. Los BMW GS Days que organiza la marca en GarmischPartenkirchen, una de las más bonitas estaciones de esquí de esta parte del continente, en el estado de Baviera y muy cerca de la frontera con Austria, a los pies de la montaña más alta de Alemania.
Pero lo importante no han sido los tres días que he pasado allí, lo verdaderamente apasionante ha sido llegar hasta allí y la excusa perfecta para compartir un viaje, para probar los nuevos Continental Trail Attack II y ver cómo funciona el Tom Tom Rider y sobre todo estrenar mi F700GS. Así que el martes anterior a este fin de semana, hemos quedado un grupo de cuatro motos para llegar juntos hasta Alemania.
La primera etapa ha sido llegar hasta Santander, donde descansamos en el camping de Isla Playa. Desde allí, al día siguiente y con el ánimo muy alto, las tres BMW 1200GS y mi F700GS hemos salido rumbo a Bayona, en Francia, dónde tras una tremenda lluvia. El comportamiento de las Trail Attack II con la moto cargada y mucho agua en el asfalto ha sido espectacular, un agarre perfecto, sin sustos. De Bayona rumbo a cruzar la Francia profunda, nada de autopistas, todo carreteritas comarcales que nos han hecho disfrutar de paisajes y pequeñas poblaciones. El tercer día, turno a el TomTom Rider, que gracias a su aplicación de «carretera con curvas» ha evitado cada nacional y nos ha hecho disfrutar de las verdes montañas suizas.
A la mañana siguiente, no sin divertidas anécdotas sobre el montaje de las tiendas en plena noche, nos dirigimos hacia Suiza, de nuevo dejando el mapa en papel de lado, evitamos peajes y carreteras de ancho arcén y nacionales y nos llevase por los caminos más revirados de la frontera con Suiza. Dormimos en un pequeño prado entre el arrullo de los cencerros que llevan en el cuello las cientos de vacas que por estos prados pacen. Madrugón y tras un desayuno campestre, de nuevo en nuestras BMW rumbo a Garmisch, Alemania.
Sin incidencias llegamos a Alemania y entre grandes picos, bordeando los ríos más profundos, llegamos hasta nuestro destino.
Más de 30.000 personas se congregaron el fin de semana en este estado bávaro, entre motos, amantes de BMW, expositores, clásicas y hasta despedidas de soltera que se celebraban gracias a la fiesta y conciertos en directo bajo la carpa principal. Mi BMW, fotografiada hasta la saciedad, primero por ser el único modelos F700GS (la pequeña de los tres modelos de la saga, 700, 800 y 1200) equipada hasta las trancas por Touratech con protecciones de chasis, motor y cárter, maletas laterales, top case y su típica maleta amarilla, estanca.
Héroes del Gobi
Este es el nombre de mi siguiente aventura que comenzará en menos de un mes: unir Barcelona con UllaaanBataaar, en Mongolia y de allí, si consigo el presupuesto suficiente, llegar hasta Japón. Una travesía de dos meses por Euro-Asia, una de las zonas menos exploradas de nuestra parte del Mundo y con un claro fondo solidario: llevar las donaciones recogidas mediante mis redes sociales, blogs y revistas o periódicos donde colaboraré hasta la capital de Mongolia, para utilizar todo ese dinero en ayudar a un pequeño orfanato que allí se encuentra. Todo grabado y editado para la proyección de mini-videos durante el camino (un videoblog) casi en tiempo real. Si todo va bien, estaré en marcha el dos de agosto, para regresar a nuestro país con la misión cumplida, desde Tokio a finales de septiembre.