El primero
Un scooter eléctrico, con tecnología de vanguardia y prestaciones de una moto grande, lleva frenos regenerativos de recarga con ABS y una autonomía real de hasta 100 kilómetros
Efectivamente tienes razón, no es el primer scooter eléctrico del mercado, pero sí que es el primer modelo puesto en la calle y que cualquiera puede comprar, de una marca de las llamadas «grandes». Y a BMW no le agrada hacer las cosas a medias, gusta de marcar su propio camino y con el C Evolution no iba a cambiar sus costumbres.
Basado en la tecnología que ya utilizan en su coche eléctrico i3, su motor está refrigerado por líquido para mantener estables las prestaciones e incluso las baterías están refrigeradas por unos ventiladores. Entrega 15 CV nominales (potencia que entrega de forma continua) por lo que se puede conducir con el carnet B, pero su potencia de «pico» (la que puede entregar de forma esporádica) llega hasta los 48 CV, si a estas cifras unimos la ya conocida capacidad de los motores eléctricos de entregar el máximo par desde el arranque, imagina las prestaciones, similares a las de un buen 500/600 c.c. de gasolina y con una aceleración que ningún otro scooter puede igualar.
El chasis está formado por un «cajón» de aluminio que integra las baterías, fabrica- das por Samsung- BOSCH utilizando ion-litio y que BMW garantiza por 5 años. El tiempo de recarga en el garaje de casa es de unas 4 horas, con un coste aproximado de algo más de 1 euro por cada 100 kilómetros. Las suspensiones son convencionales, al igual que los frenos, con ABS de serie. La transmisión final es por correa dentada. Y toda esta tecnología se controla con el acelerador, para el que disponemos de 4 modos de uso que se pueden ir cambiando so- bre la marcha con un pulsador en el manillar. El más ahorrador es el Eco-Pro, con aceleración limitada y máxima recarga en retención. El más equilibrado, el Road con buena aceleración y mediana retención y recarga. Para uso deportivo cambiaremos al Dynamic, con la máxima aceleración y retención posibles. Y para autopista pondremos el modo Sail, con buena aceleración pero sin ninguna retención, como si fuera en punto muerto, sin consumir nada.
Rabia acelerando
La primera impresión es magnífica, su aspecto y terminación es excelente y os aseguro que llama la atención allá por donde pasa. En marcha su comportamiento es de primera y aunque en parado es pesado, los kilos desaparecen en movimiento al tener un centro de gravedad muy bajo, además incorpora marcha atrás para estas maniobras. Acelera con rabia, incluso salta el control de tracción en ocasiones, y su comportamiento dinámico es el de un scooter deportivo, aunque está limitado a 120 km/h. por razones de consumo. En todo momento nos informa de la autonomía restante según nuestra forma actual de conducir, por lo que es importante y al tiempo divertido, llevar una conducción responsable, anticipándote al tráfico y usando el motor para retener (y recargar) es posible circular sin tocar los frenos. Los 100 km declarados como autonomía son reales y aunque quede poca carga la respuesta del motor no varía. Sólo en situaciones muy apuradas, restando unos 10 km, entra en modo Eco- Pro o incluso mayores limitaciones para intentar la mayor autonomía posible.
De momento no es una moto para cualquiera, sus limitaciones y su precio, acotan a sus usuarios, pero sin ellas me ha parecido una moto perfecta para el día a día, con un comportamiento intachable.