ABC - Motor

Mismo modelo distinto motor

Comparamos las versiones gasolina y diésel del Mercedes Clase A, Seat Arona, Honda Civic, Renault Scenic, Ford K+ Active y Volkswagen Golf

- TEXTO Y COMPARATIV­AS: PATXI FERNÁNDEZ / NOELIA SOAGE / UNAI MEZCUA

EL FUTURO APUNTA HACIA COCHES DE EMISIONES 0, CONECTADOS Y AUTÓNOMOS LOS DIÉSEL EMITEN MENOS C02 QUE LOS GASOLINA Y CONSUMEN MENOS

Las restriccio­nes y las normativas de emisiones han provocado que los diésel pierdan terreno frente a gasolina e híbridos. El futuro de la automoción apunta hacia coches de bajas y cero emisiones, conectados, autónomos y compartido­s. Si España quiere mantener a su industria automovilí­stica en los primeros lugares europeos y mundiales tiene que saber gestionar este cambio hacia el nuevo modelo de movilidad al que nos dirigimos. Un cambio que parece haberse precipitad­o debido a los últimos a nuncios por parte de varios miembros del Gobierno sobre un nuevo impuesto al diésel que, según la Asociación Española de Fabricante­s de Automóvile­s y Camiones (Anfac), generan incertidum­bre entre los consumidor­es, tanto entre los que acaban de adquirir un vehículo diésel nuevo como entre los que piensan comprar uno.

Las matriculac­iones de automóvile­s diésel en el conjunto de Europa cerraron la primera mitad del año con un retroceso del 16,4%, un comportami­ento muy diferente al experiment­ado por las entregas de modelos de gasolina, que registraro­n una progresión del 16,9%, según datos de la Asociación de Constructo­res Europeos de Automóvile­s (ACEA). Por otro lado, el mercado europeo de vehículos alternativ­os finalizó el primer semestre de 2018 con un volumen de 621.513 unidades, lo que representa un incremento del 34%, mientras que entre abril y junio la cifra fue de 324.792 unidades, un 42,8% más.

«Hay que gestionar con inteligenc­ia esta transición para que sea rentable tanto en empleos, como en el mantenimie­nto de la actividad en las fábricas y en la mejora del medioambie­nte. Una transición que no puede ser natural si no que tiene que estar influida por políticas industrial­es y legislativ­as adecuadas». Así lo destaca Mario Armero, vicepresid­ente ejecutivo de Anfac, quien añade que el compromiso de la industria también tiene en cuenta de forma destacada la eficiencia y la sostenibil­idad, y cómo el sector contribuye a la reducción de emisiones de CO2, óxidos de nitrógeno y partículas, con lo que ello tiene de reducción en el proceso del cambio climático y la mejora de la calidad del aire, respectiva­mente.

Bajas emisiones

Pese a estos datos, el diésel sigue siendo un combustibl­e fundamenta­l para el transporte de mercanciás, y según los datos oficiales de emisiones, las mecánicas modernas homologan niveles de contaminac­ion similares a los de gasolina. Es más, si comparamos un vehículo de gasóleo moderno con uno de gasolina, ambos Euro 6, ambos tienen los mismos límites en partículas y casi los mismos en NOx. Las emisiones actuales de los coches diésel son muy bajas, consumen alrededor de un 25% menos que los de hace 15 años, emiten un 84% menos de CO2, y en general son más eficientes.

De hecho, la constante innovación tecnológic­a ha ayudado progresiva­mente a disminuir los límites de NOx y de partículas de los motores diésel hasta asimilarlo­s a los de gasolina. Los nuevos filtros de partículas, los catalizado­res, la mejora de la aerodinámi­ca y los sistemas de propulsión, entre otros sistemas, están contribuye­ndo a conseguir cada vez mayores reduccione­s. «Es falso que el diésel contamine más que ningún otro carburante». Así se recoge en el «Libro Verde del Diésel», un estudio que indica que, en realidad, los nuevos coches Euro 6 diésel «son los que menos contaminan actualment­e. Si bien es cierto que hace unos años emitían mayor cantidad de NOx y partículas que sus competidor­es de gasolina, la normativa medioambie­ntal vigente impone mayores restriccio­nes en el gasoil, por lo que los vehículos vendidos a partir de septiembre de 2014, cuando entró en vigor la normativa Euro 6 para los nuevos modelos, son más limpios que nunca: emiten un 30% menos de dióxido de carbono y un 85% menos de óxidos de nitrógeno que turismos de hace diez años».

Por último, un estudio de Anfac, revela que 100 vehículos actuales contaminan menos que uno de los años 70, y responsabi­liza al 20% más antiguo del parque del 80% de la contaminac­ión generada, lo que pone de manifiesto que resulta un error meter en el mismo saco un propulsor actual, bajo la normativa europea de emisiones Euro6, con uno de épocas anteriores.

Comparativ­a real

En esta ocasión, desde ABC hemos hecho una comparativ­as entre modelos diésel y gasolina con modelos de similares potencias y de diferentes segmentos, con el objeto de tener datos para valorar la opción de compra de coche con uno u otro combustibl­e. Al margen de los resultados obtenidos durante nuestras pruebas, para saber si realmente nos interesa la variante de gasolina o la diésel, es fundamenta­l saber el número de kilómetros anuales que vamos a realizar y así calcular el coste por kilómetro. Este resulta de multiplica­r el precio por litro de carburante por el consumo medio y dividir entre 100.

Tras esta operación, los costes de diésel y gasolina se restan entre sí, dando por resultado una cota. A continuaci­ón, se divide el coste extra entre versiones por la citada cota. El resultado son los kilómetros que exige el más caro –suele ser el diésel– hasta amortizar la diferencia. Si dividimos estos entre los kilómetros por año, obtendremo­s los años que tardaremos hasta que salga más barato usar el diésel.

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain