ABC - Mujer Hoy

Antes, a las consultas de cirugía llegaban pacientes con fotos de actrices. Ahora, con selfies ideales.

-

puede trabajar y no en una cuestión de suerte genética”. Como si hubiera una belleza (la occidental) y como si la vida de estás personas “beneficiad­as” por sus apps trancurrie­ra dentro de un teléfono.

Como sea, los que deciden cambiar su cara por una mejor (lo hacen chicas y chicos) están tan satisfecho­s de su nuevo aspecto que se jactan de que sus compañeros de colegio no serían capaces de reconocerl­os. Borran todas las imágenes previas a las múltiples cirugías y agradecen a la era digital que les permita que su imagen del pasado se destruya para siempre.

Cuando Cynthia P. tiene listo su selfie mejorado para publicar en Instagram, me lo enseña. No está mal: los ojos grandes, buena cara, las pestañas considerab­lemente más largas y los labios a reventar, como si se hubiera pasado con el relleno. “¿No te da miedo que no te reconozcan?”, pregunto. Su respuesta es concluyent­e: “No pongo una foto para que me reconozcan, sino para que me vean guapa.” A esta misión ha dedicado buena parte de la mañana.

Hay un mundo en el que tiene sentido que los teléfonos te “actualicen automática­mente”, léase “te recauchute­n por defecto” ya sin siquiera preguntar tu opinión. Afortunada­mente (aún) hay vida más allá de Instagram. | 21

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain