ABC - Mujer Hoy

Ácidos: clave de glow

Si quieres uno de esos rostros radiantes que brillan con luz propia, necesitas incluir los ácidos en tu rutina de belleza.

- Por

LAURA REQUEJO

QUÉ SON

Aunque su nombre intimida, los ácidos son ingredient­es esenciales en la nueva cosmética regenerado­ra que promete pieles perfectas y rostros luminosos. No todos son iguales ni hacen lo mismo: los alfa-hidroxiáci­dos o AHA (entre los que se cuentan el glicólico y el láctico) y los betahidrox­iácidos o BHA (salicílico) tienen un alto poder exfoliante a diferentes niveles. El azeláico y el ascórbico (la vitamina C) también, pero además son capaces de reparar manchas y marcas producidas por el acné. El hialurónic­o centra sus esfuerzos en la hidratació­n y el oleico es esencial para recuperar la capa lípida de la barrera de protección.

PARA QUÉ SIRVEN

Los de efecto exfoliante rompen las uniones entre las células muertas que se acumulan en la superficie. Así hacen más fácil que se suelten y se eliminen. En realidad, este es un proceso que el organismo debería hacer por sí mismo cada 21 días. Pero, con la edad, la regeneraci­ón celular se hace más lenta. Los AHA y los BHA estimulan y aceleran todo ese ciclo. Los primeros son solubles en agua, aptos para todo tipo de pieles y actúan a mayor profundida­d, con lo que, además de producir una renovación celular, activan la síntesis de colágeno. Los BHA son solubles en aceite y trabajan en el interior del poro, donde se deshacen de acumulacio­nes de sebo y células muertas. Su uso está mas dirigido a pieles con acné.

POR QUÉ

Son la vía rápida para un rostro suave, perfecto y radiante. Al eliminar la irregulari­dades de la piel, su superficie se alisa y la luz incide de forma más directa. Eso es lo que da el aspecto de rostro luminoso. Con menos obstáculos todos los cosmétios que te apliques van a ser más efectivos.

CUÁL ELEGIR

El ácido glicólico es para todas las pieles, aunque las sensibles deben empezar con concentrac­iones bajas o con ácido láctico o mandélico. El salicílico es perfecto para granos y acné, y el azeláico, para rosáceas incipiente­s.

PARA QUIÉN

Para los rostros apagados. Los encuentras formulados en sérums que actúan a lo largo del día, pero también en tónicos y líquidos que se usan con un disco de algodón después de la limpieza. Úsalos mejor por la noche porque algunos son irritantes y otros producen fotosensib­ilidad (hacen que tu piel reaccione con el sol) y pueden producir enrojecimi­entos o manchas.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain