ESCAPADAS MUY NATURALES
Para empezar el otoño, nada mejor que recargar las pilas paseando por espacios casi vírgenes o mimándote a ti misma.
ORDESA Y MONTE PERDIDO EL ESPLENDOR DEL OTOÑO
Otoño es una estación única en Ordesa y Monte Perdido. Rojos, ocres y amarillos pintan de color los bosques que cubren las más de 15.000 hectáreas de este parque nacional, que celebra este año su centenario. Situado en la comarca del Sobrarbe, en el Pirineo de Huesca, está coronado por el Monte Perdido (3.355 m) y se extiende por cuatro valles: Añisclo, Escuaín, Ordesa y Pineta. Hayas, fresnos, abedules, abetos y pinos se cubren de color durante estos meses, antes de que las primeras nieves cubran este espacio, que es también Reserva de la Biosfera y patrimonio de la Unesco. Y para celebrar su primer siglo, en octubre tienes rutas especiales guiadas para descubrirlo. Uno de los itinerarios más espectaculares es el de las cascadas, que parte desde la pradera de Ordesa y llega a la cascada de la Cola de Caballo (1.887 m), por los senderos del río Arazas, la cascada de la Cueva, la de Soaso y su circo (1.823 m), desde el que se puede ver el Monte Perdido. Una caminata de 16 km (4,30 horas), para disfrutar de la naturaleza y ver especies protegidas como el águila real o el quebrantahuesos. Si no te atreves, hay rutas más cortas y espectaculares.
DÓNDE DORMIR. Hotel Abetos, en Torla, a 1 km de la entrada. Desde 130 €.
+INFO: aragon.es/ordesa, geoparquepirineos.com y hotelabetos.es.w