El River-Boca, rumbo al Bernabéu
El estadio del Real Madrid es el favorito para albergar el 9 de diciembre la vuelta del superclásico
Salvo giro inesperado de los acontecimientos, el estadio Santiago Bernabéu será la sede de la final de la Copa Libertadores. Tras una maratoniana jornada de jueves cargada de reuniones y generosa en contactos telefónicos, el coliseo blanco apunta a ser el elegido por el máximo organismo del fútbol suramericano para albergar el partido de vuelta de la competición más importante de clubes de Suramérica.
Tras la decisión del pasado lunes, en la que la Conmebol anunció que la final se jugaría el segundo fin de semana de diciembre fuera de Argentina, para ayer se esperaba el fallo del Tribunal de Disciplina sobre la expulsión o no de la competición de River. A la hora del almuerzo, desde Argentina ya se anunciaba que el partido de vuelta de la final se jugaría sí o sí, desestimando de este modo la reclamación de Boca. Desde ese momento, todos los esfuerzos se pusieron en concretar el día, la hora y la sede del choque, y ahí apareció la FIFA para echar una mano. Ante la negativa de los dos finalistas de jugar en Asunción, Miami o Doha, el presidente de la Conmebol Alejandro Domínguez sugirió a Gianni Infantino, presidente de la FIFA, que sondeara a la Federación Española y al Real Madrid por si ambos estaban dispuestos acoger la final. El contacto tuvo una respuesta afirmativa por las dos partes y desde entonces, se empezó a trabajar en cómo sería la organización y el dispositivo de seguridad, teniendo en cuenta la envergadura del evento.
El Gobierno dice sí
A última hora de la tarde, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, precisamente en Argentina por la reunión del G-20, daba el visto bueno a la celebración del partido en Madrid: «España está dispuesta a organizar la final de la Copa Libertadores entre Boca y River. Las FCSE y los servicios implicados, con amplia experiencia en dispositivos de este tipo, trabajan ya en el despliegue necesario para garantizar la seguridad del evento», escribió en su cuenta de Twitter.
Lo hacía minutos después de que finalizara la reunión entre la Delegación de Gobierno y el Real Madrid y a la espera de que el Ministerio de Interior diera su visto bueno definitivo para la celebración del partido. Ese fin de semana del 8 y 9 de diciembre, solo el Atlético juega su partido en casa, y lo hará el sábado, por lo que el domingo sería el día elegido para la celebración de la final. La hora prevista, las 20.30, las 16.30 en Buenos Aires.
La Comunidad de Madrid, en palabras de su presidente Ángel Garrido también mostró su apoyo a que el River-Boca venga a la capital de España: «Se haría con todas las garantías de seguridad. Madrid está acostumbrada a celebrar este tipo de eventos y solo hay que recordar que el próximo 1 de junio celebraremos la final de la Champions».
En cuanto a la logística de ambos equipos, ya se habría apalabrado que River utilizara la Ciudad Deportiva de Valdebebas para realizar sus entrenamientos y la Ciudad del Fútbol de la Rozas fuera el complejo deportivo asignado a Boca para preparar este segundo asalto de la final. En principio, ambos equipos tienen pensando desplazarse a la capital de España el lunes o, como máximo, el martes.
Lo que no se sabe aún es si la Con-
mebol permitirá que el Bernabéu sea un estadio al cincuenta por ciento de aficionados de ambos equipos o solo se venderán entradas a River, que es el equipo que actúa de local. Estos detalles y otros como dónde se alojarán los equipos y si el ganador viajará directamente desde Madrid a Abu Dhabi para el Mundial de Clubes se irán conociendo en los próximos días.