Pau Gasol, baja indefinida
Una grave lesión en el pie deja al español en el dique seco y pone en peligro su futuro
Hacía ya varias semanas que Pau no pisaba la cancha. El parte médico de los Spurs no especificaba su dolencia y el español eludía las preguntas sobre su ausencia. Fue Gregg Popovich, el técnico de la franquicia de San Antonio, el que desveló finalmente ante los medios las peores noticias. «Como seguía con molestias, el equipo decidió buscar una segunda opinión con los doctores y se le ha diagnosticado una fractura por estrés en el pie izquierdo», apuntó.
Pau jugó su último partido el 4 de noviembre. Desde entonces, los Spurs han disputado doce partidos sin él y solo han ganado cuatro. Una mala racha que les ha llevado desde las posiciones de cabeza de la conferencia Oeste hasta ocupar un lugar fuera de los playoffs. Ese mal rendimiento habla de la importancia del español en los esquemas del equipo, algo que reconocía el propio Popovich tras desvelar el nuevo parte médico. «Los jugadores de la segunda unidad lo extrañan porque crea mucho movimiento a su alrededor, es un buen pasador y además puede encontrar con facilidad la canasta, así que su ausencia realmente ha afectado a esa segunda unidad», explica el técnico.
Popovich había llegado a un acuerdo con el catalán para cambiar su rol en el equipo esta temporada. A sus 38 años, la idea era que Pau comenzara la mayor parte de los partidos desde el banquillo. Algo que nunca había hecho antes desde que llegó a la NBA. Aun así, pensaba que podía ser algo positivo para él liderar esa segunda unidad de los Spurs, con jugadores más jóvenes y llenos de talento. Así lo había hecho durante el inicio de la campaña, firmando números discretos, pero siendo muy efectivo para el equipo.
Sus promedios más bajos
Desde que aterrizó en la NBA en 2001, Pau siempre había ocupado un rol principal hasta esta temporada en la que antes de la lesión acumulaba sus promedios más bajos. Apenas 6,8 puntos y 6,1 rebotes en poco más de 17 minutos de juego por partido. Estadísticas que no reflejaban su importancia real en la cancha, donde el español seguía siendo una pieza central para los Spurs, que desde su lesión no levantan cabeza.
En este tiempo, Pau lo ha intentado todo para recuperarse y volver a la cancha, pero los dolores no han remitido. Al español se le ha podido ver con una protección en el pie. Férula que le había sido retirada ya y que hacía prever un regreso inminente. Todo lo contrario, ya que el último diagnóstico le aleja de las canchas sin fecha definida.
Jugar hasta los 40
La lesión amenaza con truncar la temporada para el español y pone en riesgo su futuro. Porque la idea de Gasol era mantener su nivel como sexto hombre para alargar su carrera en la NBA al menos hasta el verano de 2020, fecha en la que se disputarán los Juegos Olímpicos de Tokio. Su idea es colgar allí las botas con el equipo nacional y seguir buscando contratos en la NBA de manera anual para seguir disfrutando del baloncesto.
Su ejemplo son Vince Carter, que a sus 41 años continúa jugando en la liga y cumpliendo un rol principal, o David West, que en los últimos años de su carrera firmó un contrato de veterano con los Warriors, con los que ganó dos anillos.