ABC (Nacional)

Doña Letizia estrena la tiara Rusa

María Fedorovna de Rusia puso de moda las diademas «kokoshnik» a finales del siglo XIX

- MARÍA LUISA FUNES

Con motivo de la cena de Estado ofrecida en el Palacio Real en honor del presidente de China, Xi Jinping, y su esposa, Peng Liyuan, la Reina Letizia llevó por primera vez la tiara Rusa, la última gran joya de la Familia del Rey que le quedaba por estrenar. La acompañó con un majestuoso pero discreto vestido de terciopelo negro de Felipe Varela, con las pulseras gemelas de brillantes de Cartier, el broche con forma de flor de lis de la tiara Princesa y los pendientes de chatones de la Reina Victoria Eugenia.

La tiara Rusa fue un encargo de la Reina María Cristina en el siglo XIX. La madre de Alfonso XIII y Regente de España entre 1885 y 1902 se inspiró en la moda de las otras casas reales europeas, que contaban con su propia «tiara Rusa». Hecha en platino, perlas y brillantes, se asemeja a las tiaras de estilo Kokoshnik de las Familias Reales de Suecia, Dinamarca, Rumanía, Holanda e Inglaterra. En 1888, la entonces Princesa de Gales,

Alexandra de Dinamarca, había recibido con motivo de sus bodas de plata con Eduardo VII una diadema de inspiració­n rusa, pieza que siempre había deseado desde que se la vio a su hermana, María Fedorovna, Emperatriz de Rusia.

Los tocados de estilo Kokoshnik –literalmen­te «peine de gallo» en ruso– eran de origen popular y los llevaban las señoras casadas para cubrir su cabello. Ya en el exilio, Alfonso XIII cedió la pieza a su futura nuera, María de las Mercedes de Borbón y Orleans, madre del Rey Don Juan Carlos, como regalo de su boda con Don Juan.

Las tiaras Kokoshnik estuvieron de nuevo a la moda en 1920, aunque algo menos cuando la heredó la Condesa de Barcelona, quien, a su vez, cedió la tiara a su hija Doña Pilar para su boda con Luis Gómez-Acebo, en 1967, y a su nieta Simoneta para la suya, en 1990. Pero Don Juan Carlos, verdadero continuado­r de la labor de su abuela en la ampliación de las «joyas de pasar» ideadas por Victoria Eugenia, negoció con sus hermanas para quedarse con esta preciada pieza y Doña Sofía empezó a lucirla en el año 2006 durante una visita oficial a Noruega.

Recienteme­nte hemos visto a la Princesa Eugenia de York luciendo la tiara Greville Kokoshnik de esmeraldas que su abuela Isabel II le prestó para la ocasión. Los tocados Kokoshnik fueron en su día impulsados por la Reina Catalina la Grande, gran revitaliza­dora de las costumbres rusas a pesar de haber nacido en Alemania. Escondidos durante la época de la revolución bolcheviqu­e, los habían lucido actrices, bailarinas como Anna Pavlova, emperatric­es y princesas, pues era un símbolo de riqueza y elegancia que poco a poco se convirtió en un must de las casas reales europeas en la Belle Époque. Ahora, casi un siglo después, renace la popularida­d de las diademas Kokoshnik. En moda, todo se va. Y todo vuelve.

 ?? FOTOS: ABC Y REUTERS ?? La Reina, en la cena de gala del pasado miércoles en el Palacio Real
FOTOS: ABC Y REUTERS La Reina, en la cena de gala del pasado miércoles en el Palacio Real
 ??  ?? Reina Doña SofíaEn 2006, en una cena en Oslo
Reina Doña SofíaEn 2006, en una cena en Oslo
 ??  ?? Simoneta Gómez-Acebo En 1990, la lució en su enlace
Simoneta Gómez-Acebo En 1990, la lució en su enlace
 ??  ?? Infanta Doña PilarLa llevó en su boda, en 1967
Infanta Doña PilarLa llevó en su boda, en 1967
 ??  ?? Doña Mª de las Mercedes La recibió al casarse
Doña Mª de las Mercedes La recibió al casarse
 ??  ?? Reina Maria Cristina Encargó la tiara
Reina Maria Cristina Encargó la tiara

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain