ABC (Nacional)

La pertinaz plaga de lesiones musculares

Vallejo se incorpora a la enfermería blanca con Bale, Kroos, Llorente, Courtois, Mariano y Asensio

- T. GONZÁLEZ-MARTÍN MADRID

Ha disputado catorce partidos en año y medio. Esta temporada solo llevaba dos, ante el CSKA de Moscú y el Melilla. No ha debutado en la Liga. Dicen quienes le conocen dentro del Real Madrid que Vallejo se inyecta tanta presión, por la importanci­a de jugar en el Real Madrid, que la tensión explota por sus piernas. Ayer se rompió muscularme­nte por cuarta vez en siete meses.

La lesión de Vallejo significa el sexto contratiem­po muscular del año. Marcos Llorente cayó el 1 de enero. Después sufrieron dolencias el castillist­a Javi Sánchez, quien ya reapareció con el filial este fin de semana, y los titulares Bale, Kroos y Courtois. A ellos se añaden a Asensio, que fue baja en el Mundial de Clubes ganado en Qatar, y Mariano, víctima de una irritación del nervio ciático. El dedo meñique de Benzema, fracturado en Sevilla, hace pensar que hay un vudú negativo contra el Real Madrid.

El hospital de campaña que el Real Madrid ha tenido que desplegar debe conceder varias altas a partir de esta semana. Courtois, Mariano y aprietan para estar listos ante el partido sabaino frente al Sevilla. Marcos Llorente y Asensio esperan jugar ante el Espanyol, el 27 de enero. Kroos y Bale serán alta también a finales de mes.

Todos listos en quince días

Todos deben estar en buenas condicione­s para atacar la Champions, frente al Ajax, el 13 de febrero en Amsterdam.

¿Por qué soporta el Real Madrid está plaga de lesiones musculares? El club intenta definir las causas. La primera es una mala planificac­ión de la temporada desde el mes de julio en este capítulo. La segunda es un calendario muy duro, con partidos cada tres días. Y la tercera es que Pintus ha intentado mejorar el estado físico del plantel, muy bajo desde septiembre, y al forzar la máquina mínimament­e, porque no hay fechas libres para hacer un trabajo de velocidad, potencia y resistenci­a continua, han surgido las dolencias de Bale y de Kroos, pero también de jóvenes como Marcos Llorente y Asensio, con ansiedades opuestas por demostrar su nivel.

El reto de los lesionados es hacer la ansiada pretempora­da invernal en esta fase de recuperaci­ón para enfilar la recta decisiva de la campaña en una buena puesta a punto.

Vallejó lloraba ayer, desconsola­do. Solari le dio ánimos para calmar su deseperanz­a. La plantilla le arropó. El zaragozano levantó la cabeza. Volvió a mirar al frente. Hoy sabrá el resultado de la resonancia.

En el Real Madrid rememoran que Fernando Gago sufrió un estrés similar al del central maño hace una década. El argentino se rompía por su obsesión psicológic­a de exigirse rendir. Llegó a pensar en un mal de ojo lanzado contra él. Intentaba descubrir lo que le pasaba y no sabía la razón.

El mal fario de Jesús Vallejo es una musculatur­a vulnerable que se ha resquebraj­ado desde que jugaba en el Zaragoza. Unos músculos que volvieron a hacerle algún daño en el Eintracht de Francfort. Unas dolencias que en el Real Madrid se han transforma­do en un problema crónico, lastrado por su anhelo de hacerlo bien para ganarse un futuro en el Real Madrid. Sus piernas no le dejan. Son su rival. Pensaba disputar su tercer encuentro del curso en Leganés, mañana, y se ha quedado con el ansia.

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Vallejo se rompió por cuarta vez esta temporada

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