La demanda del AVE a Barcelona se reactiva y dispara los precios
El tráfico aéreo repunta un 55% en El Prat y un 53% en Palma de Mallorca
La desbandada producida este fin de semana en ciudades como Madrid ha tenido un impacto directo en las tarifas de la alta velocidad y la aviación. Tanto el precio del AVE a Barcelona como el del Puente Aéreo se dispararon el viernes por la alta demanda registrada, que desbordó una oferta todavía limitada.
Así, durante algunas horas del día el precio de los AVE rozó los 150 euros. Una subida que también afectó al competidor de Renfe, Ouigo, que pese a tener una tarifa base de nueve euros llegó a vender billetes por más de 60. Tras el pico de demanda, los precios volvieron a caer durante el fin de semana.
La compañía francesa de bajo coste utiliza un sistema de tarifas dinámicas que provoca que el coste de los billetes suba cuando existe mucha demanda. Es una política comercial que nació en la aviación de la mano de compañías como Ryanair y que también ha sido implantado por empresas como Cabify o Uber. No obstante, en días de picos de demanda, estas compañías suelen implantar un tope para que los precios no sigan subiendo sin parar.
Renfe también tiene previsto implantar las tarifas dinámicas en la venta del AVE y larga distancia, pero será a partir de junio. Por el momento, la compañía pública utiliza un sistema
Aeropuerto de Palma de Mallorca que premia la antelación: cuanta más distancia exista entre la compra del billete y el día del viaje, más barato saldrá el trayecto. Por eso el viernes los billetes para viajar este fin de semana estaban tan caros.
El operador redujo su oferta tras el estallido de la pandemia por las restricciones a la movilidad. Sin embargo, para este fin de semana –en el que además de ser el primero sin estado de alarma coincidieron la festividad de San Isidro en Madrid y el Día de las Letras Gallegas en Galicia– Renfe añadió 41 nuevos trenes a las circulaciones programadas para reforzar con 15.413 nuevas plazas las líneas de los principales corredores.
Las líneas más reforzadas fueron las del sur: Madrid-Sevilla contó con 14 trenes y 4.830 plazas adicionales y en Madrid-Málaga se añadieron 10 trenes y 3.340 plazas. En la ruta MadridBarcelona se añadieron nueve trenes adicionales que incrementaron la capacidad en 3.654 asientos.
Pero el fin de las restricciones no solo ha afectado a los precios de la alta velocidad. En el sector aéreo también se registraron importantes subidas durante la semana pasada, tanto en rutas nacionales como en trayectos internacionales. Pese a que los pasajeros todavía necesitan presentar una PCR negativa en la mayoría de aeropuertos europeos, el número de vuelos está creciendo con fuerza en las últimas semanas; según los datos de Eurocontrol, entre el 29 de abril y el 13 de mayo el tráfico creció un 55% en el aeropuerto de Barcelona-El Prat y un 53% en el de Palma de Mallorca.