El extesorero pagó a un preso para destruir el audio de Rajoy
Durante la declaración de Luis Bárcenas en la parte secreta del sumario de Kitchen alzada esta semana, el extesorero del Partido Popular aseguró ante el juez Manuel García Castellón que ordenó desde la cárcel de Soto del Real la destrucción de dos grabaciones: una de Mariano Rajoy y otra de Javier Arenas. En estos audios se hablaba de la doble contabilidad del partido. La destrucción de estas grabaciones la pergeñó Bárcenas desde prisión y a través de un preso, compañero suyo, de nacionalidad colombiana. «Lo que tenía que hacer el colombiano era entrar en la nube, y con la clave y contraseña que le había facilitado previamente, acceder a la información, en concreto a una carpeta de audios donde estaban los dos descritos», asegura el extesorero. Bárcenas explica al juez que quería la destrucción de estas grabaciones porque en ese momento había firmado una tregua con el Partido Popular.
Al colombiano, que tenía conocimientos de informática, le hizo «entrega a través de Sergio Ríos de 2.500 euros para que pudiese comprar un equipo», explicó Bárcenas, con el objetivo de conseguir esas grabaciones y una vez con ellas en su poder, destruirlas. Sin embargo, según su declaración, no llegó a recuperarlas.
Bárcenas ha incurrido en contradicciones sobre estas cintas a lo largo de los años. Sin embargo a su hijo, al menos, se lo contó. Ante el juez, Guillermo ‘Willy’ Bárcenas reconoció que le había hablado de «grabaciones» con «la entrega de algún sobre a Mariano Rajoy».