Ventas como la de Dembélé, Griezmann o Coutinho, por menos de 60 millones, no serían rentables por las amortizaciones pendientes

obstante, en el caso del Barcelona ni será fácil ni tan ventajoso. Marc Menchén, director y fundador de 2Playbook, plataforma de negocios para la industria del deporte, lo explica a ABC: «El problema que tiene el Barcelona, a diferencia de otros clubes, es que todos los jugadores con los que realmente se podría sacar importes elevados en un traspaso tienen aún

Si Messi decidiera no continuar, el club se ahorraría 100 millones de una tacada, pero desde las oficinas de Arístides Maillol se considera que el rosarino es una fuente considerable de ingresos y un imán para patrocinadores deseosos de vincular su imagen con la del astro argentino. De hecho, será clave a la hora de negociar la renovación con Rakuten, espónsor principal de la entidad. «La renovación de Messi, si se produce en esos términos, supone un balón de oxígeno porque no solo te ahorras 50 millones de gasto anual, sino que en el fondo mandas un mensaje al resto del vestuario: si el capitán ha hecho el sacrificio de bajarse el sueldo a la mitad no hay condicionantes para que el resto de jugadores no sigan sus mismos pasos, sobre todo sabiendo que hoy el Barcelona tiene un agujero de casi 300 millones de euros», justifica Menchén.

Desde el club catalán también se contemplaba la idea de dar cartas de libertad, con el consiguiente ahorro de fichas. Se valoró con Umtiti, Matheus o Sergi Roberto, pero se ha descartado porque ello no eximía de pagar la indemnización por rescindir un contrato anticipadamente. pretensión dependerá de la decisión que tome Varane, que se ha negado hasta ahora a renovar y su contrato acaba el próximo año. La entidad sevillista quiere hacer un buen negocio con él y se ha subido a la parra. Pide la cláusula de rescisión: 80 millones. El Real Madrid nunca pagará ese precio por un central. El Sevilla desea traspasarle y el verano es muy largo. Koundé piensa que el Real Madrid es su sitio ideal y debe presionar para alcanzar su meta. El interés de Lopetegui por Isco puede abrir puentes. El problema del Sevilla es que no desea pagar la ficha del andaluz, que supera los seis millones.