·Tras la medida de gracia aprobada por el Gobierno, ABC sondea a autores catalanes de distintas tendencias ·«Al independentismo no se le combate a base de zanahorias; al contrario, se le engorda», asegura Xavier Pericay
En este asunto de la independencia hasta las comas significan. Desde que el Gobierno de Pedro Sánchez anunció la conmutación de la pena a los que habían cometido ya no un delito sino hasta cinco, ha surgido una corriente de optimismo en la que muchos ven claudicación. Hay incluso quienes asumen los indultos como un asunto de fe, la elección de una creencia incompatible con la base racional, una forma bienintencionada de llevarle la contraria a los hechos. Para aclarar las cosas conviene buscar el punto de vista de quienes manipulan a diario la más inflamable de las herramientas: las palabras.
A falta de un indulto a los que discrepan del relato independentista, hablan escritores, columnistas y creadores. ¿Qué piensan quienes viven y publican sus obras en una comunidad autónoma que aporta casi el 50% de la facturación del sector editorial pero cuyas autoridades arrinconan el castellano? Después de la medida de gracia, ¿será posible criticar en un lugar donde el disidente es hostigado? Son escritores, pero también ciudadanos. Y algo tendrán que opinar al respecto.
«Existen razones muy poderosas para oponerse a los indultos, la principal de las cuales es que los presos del ‘procés’ no sólo no se han arrepentido de lo que hicieron, sino que siguen proclamando que lo que hicieron fue correcto y, en casi todos los casos, que lo volverán a hacer», escribió Javier Cercas esta semana en ‘El País’. «Ahora mismo no resulta fácil encontrar entre los constitucionalistas catalanes a alguien contrario a los indultos; los argumentos son conocidos: se cree que parte del secesionismo de a pie apreciará la medida y que por tanto ayudará a destensar la situación y a propiciar el diálogo». en Cataluña. La mayoría de quienes los suscriben se han mudado a otros lugares.