Barceló destrona a Globalia como mayor conglomerado del sector
▶ Los Hidalgo pierden las agencias de viajes, que suponían casi un tercio de sus ingresos
Barceló ya tiene en su poder el 100% de Ávoris, el mayor grupo de agencias de viajes en España, con alrededor de 1.500 puntos de venta y 6.000 empleados. La marca balear recibió la semana pasada el visto bueno de Competencia, los bancos y la SEPI para hacerse con el 49,5% de las acciones que poseía Globalia por un euro y la asunción de más de 200 millones de deuda. Una operación que significa mucho más que el adiós de la familia Hidalgo a su antaño centro de gravedad empresarial, Halcón Viajes. También supone la despedida de la matriz de Air Europa a un modelo de negocio vertical con el que nutría a la propia aerolínea y a sus hoteles. Pero ahora solo existirán en España dos compañías de esas características: Iberostar y su propio verdugo, Barceló, que con las más de 30 marcas de Ávoris ya aspira a superar en ingresos a Globalia.
La familia Hidalgo ya no dispondrá del negocio de las agencias de viajes, que en 2019 le reportó casi un tercio de los más de 4.000 millones que entraron en caja. Esto, mientras además, el grupo puede continuar en descomposición, con el cierre de la venta de Air Europa a IAG (matriz de Iberia) todavía en el horizonte.
La operación sigue pendiente de cerrarse y podría hacerlo antes de marzo del próximo año, momento en el que caduca la exclusividad de Iberia para negociar por la aerolínea balear.
Una venta anunciada a la que se puede sumar la de su cadena de hoteles, Be Live, en el escaparate desde hace un año. Como ya contó este periódico, de firmarse ambas ventas, Globalia quedaría en estado raquítico con el negocio de ‘handling’ como último bastión empresarial de la familia Hidalgo.
Gigante del sector
Y mientras unos caen, a otros les tocará subir. Con el movimiento de Ávoris, Barceló tendrá en cartera al primer grupo de distribución turística compuesto por más de 30 marcas entre agencias, turoperadores y bancos de camas que en 2019 (antes de la fusión con Globalia) facturaron 4.000 millones; la segunda hotelera española, con más de 60.000 habitaciones en todo el mundo, y una aerolínea ( Iberojet, integrada en Ávoris) que cuenta ya con una flota de siete aviones, seis de ellos con capacidad para hacer vuelos transatlánticos, ya que su operativa está centrada en el Caribe e Iberoamérica.
La aerolínea renombrada en 2021 (anteriormente conocida como Evelop) ya ha transportado este año casi a medio millón de pasajeros y se encuentra cerca de superar los viajeros llevados en 2019 con Evelop (560.000), según reflejan los datos de Aena.
Pero es en el negocio hotelero donde está más centrada la compañía balear. A través de las cuatro marcas con las que opera (Royal Hideaway, Barceló, Occidental y Allegro), la empresa propiedad de la familia Barceló presume de estar firmando un 2022 a la altura de la época prepandemia.
Ya antes del verano, el grupo pronosticaba para 2022 unos ingresos por encima del último año antes del Covid-19. Algo urdido por el ‘ boom’ de demanda de viajes tras dos años de restricciones sanitarias, que permitía a la empresa ingresar a doble dígito por encima de 2019 en algunas zonas geográficas.
Además, la división hotelera tiene previsto cerrar 2022 con una veintena de aperturas, mientras estudia la posibilidad de realizar alguna operación corporativa. De hecho, la empresa aún no descarta volver a la puja por la cadena Be Live de Globalia, por la que ya mostró interés el año pasado.
En 2019, el grupo en su totalidad facturó 3.100 millones de euros, una cifra que será complicada de superar este año por la recuperación tardía de las ventas de las agencias, que dependen del mercado emisor. Pero con la adquisición del 100% de Ávoris no se antoja complicado sobrepasar esa cantidad en 2023.
Barceló tiene el mayor grupo de agencias de viajes en cartera, además de la segunda hotelera por número de camas