¿Por qué se produce?
ni se someten a revisiones periódicas. Esa sigilosidad convierte al glaucoma en un enemigo de la visión especialmente peligroso y refuerza el mensaje de los especialistas de incidir en una detección precoz. De ahí que una proposición no de ley para actuar contra el glaucoma, aprobada el año pasado por unanimidad en el Congreso de los Diputados, se refiera a la enfermedad como «el ladrón silencioso de la visión».
Controles bianuales
La doctora Silvia Freixes, del Departamento de Glaucoma del IMO, advierte de que «para prevenir la dolencia es fundamental realizar controles bianuales a partir de los 40 años». Si la persona se encuentra en el círculo de la población de riesgo, es decir, la que tiene antecedentes familiares directos de glaucoma, ha superado los 60 años, es de raza negra o asiática, o sufre alta miopía u otras patologías oculares importantes, los controles deben ser anuales, añade Freixes.
El diagnóstico temprano se realiza de forma rápida e indolora y empieza por el control de la presión intraocular, ya que es la única causa conocida y contra la que se puede luchar. En los pacientes con glaucoma, la presión del ojo suele estar en rangos superiores a los considerados «normales», debido a la acumulación de humor acuoso (líquido transparente que baña las estructuras oculares y mantiene sus propiedades ópticas), que no puede evacuarse correctamente, como ocurre en un ojo sano.
Desde el Departamento de Glaucoma del IMO, explican que la presión intraocular es la pieza clave de los tratamientos actuales de la enfermedad, cuyo principal objetivo es reducirla, mediante colirios, láser o cirugía convencional (trabeculectomía, escleroctomía profunda no perforante o implantación de válvulas). Aunque la mayor parte de los glaucomas tienen su origen en la presión, también hay casos con rangos normales de presión intraocular, asociados a presión arterial baja, pérdida importante de sangre, enfermedad de Raynaud o migrañas, entre otras posibles factores.
Estos casos pueden detectarse a través de otras pruebas que acompañan a la toma de la presión intraocular, como la prueba de agudeza visual o la exploración del nervio óptico. Si en este primer control se observa riesgo de glaucoma, el oftalmólogo realiza nuevas pruebas.
UN CÍRCULO
VERDE SIMBOLIZA LA PÉRDIDA DE
VISIÓN PERIFÉRICA DEL GLAUCOMA
Coincidiendo con la Semana Mundial del Glaucoma, que tendrá lugar del 11 al 17 de marzo, la Fundación IMO, dedicada a la investigación, docencia y prevención de las enfermedades oculares, ha impulsado la campaña «Rompe el cerco a la visión», con la que pretende luchar de forma preventiva contra el glaucoma. La concienciación social es el primer objetivo de la campaña, que distribuirá por España miles de «pins» que reproducen signos circulares de color verde para la solapa, en alusión a la pérdida periférica de la visión que provoca el glaucoma. Este pequeño aro, de color verde en señal de esperanza respecto a la futura curación de la enfermedad, es la parte más simbólica de una campaña que también distribuirá información sobre la patología, ofrecerá charlas para profesionales y público en general y pondrá a disposición de la población de riesgo pruebas gratuitas de «screening», en la Unidad de Diagnóstico Precoz del Instituto de Microcirugía Ocular de Barcelona.