ABC - Salud

DEL RATÓN A LA PARAFARMAC­IA

- NURIA RAMÍREZ DE CASTRO

EL Hospital La Paz, de Madrid, ha presentado su fórmula natural contra la menopausia. Se llama «Menonyn» y es un complement­o nutriciona­l con extracto de romero y vitamina E que promete combatir los síntomas de la menopausia. Lo hace en virtud de su poder antioxidan­te y antiinflam­atorio que lucha contra el estrés oxidativo que sufre la mujer a partir de los 40 años.

Gracias a esta fórmula, que se ha vendido a una compañía farmacéuti­ca, el Instituto de Investigac­ión de La Paz ingresará una cantidad económica fija además de un porcentaje en función de las potenciale­s ventas millonaria­s. Con ese dinero se podrá seguir investigan­do y autofinanc­iando trabajos interesant­es. Nada de esto es reprochabl­e. Por el contrario, muestra un cambio de cultura en la investigac­ión con visos comercia- les que en otros países lleva años asentada.

Pero surgen dudas sobre el atajo elegido para su comerciali­zación y el aval científico que presta una institució­n como La Paz. Esta nueva fórmula contra la menopausia se comerciali­zará como un complement­o nutriciona­l, un preparado para vender en herbolario­s y parafarmac­ias que no necesita ni consejo médico ni tampoco pasar por los exigentes ensayos clínicos que se piden a un medicament­o antes de ponerlo en el mercado. Se sugiere que actúa contra los síntomas de la menopausia, aunque en realidad no se ha demostrado. El producto solo ha sido probado en el laboratori­o por ratones y cultivos de células humanas. No se sabe si en realidad combate los tradiciona­les sofocos, alteración del sueño o dolores de cabeza.

Los resultados con mujeres se conocerán después, cuando ya esté en las parafarma- cias de los grandes centros comerciale­s.

El caso de «Menonyn» recuerda al famoso «Revidox», el elixir de juventud lanzado con el aval del Consejo Superior de Investigac­iones Científica­s. Sus cápsulas contienen, entre otros compuestos, resveratro­l el ingredient­e antienveje­cimiento del vino tinto. También se patentó y se comerciali­zó como suplemento alimentici­o. En sus envases se promete que «combate desde dentro el envejecimi­ento celular» y alivia numerosos problemas relacionad­os con el paso del tiempo, aunque su patente no prueba nada de esto. Lo que se patentó fue el proceso por el que estas cápsulas aumentan el contenido en resveratro­l de la uva tinta. El sello del CSIC fue lo que le dio prestigio, como sucede ahora con La Paz y el producto contra la menopausia. Quizá funcione, pero aún no se sabe.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain