Zapato anticaídas
Ingenieros israelíes han diseñado un zapato especial que es capaz de evitar caídas, como las que sufren las personas mayores, por problemas de equilibrio o debilidad muscular
Ingenieros israelíes diseñan los primeros zapatos pensados para los mayores
Con la edad, se pierden reflejos y el equilibrio se resiente. Según estadísticas de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología ( SEGG), más de 1.400 personas mayores de 65 años mueren anualmente en España tras sufrir una caída, número que aumenta exponencialmente a partir de los 75 años.
Yonathan Manor, ingeniero biomecánico israelí, sufrió estas estadísticas en su propia familia, cuando su padre de 80 años sufrió una caída que le obligó a estar convaleciente varios meses. Manor, decidido a evitar un segundo accidente, comenzó a observar los movimientos de su padre y de otros ancianos en una residencia y se fijó en que la gran mayoría tendía a poner el peso sobre los talones.
Manor, convencido de que podría haber dado con la clave, contactó con dos ingenieros eléctricos para ponerse manos a la obra y crear el primer zapato que evita las caídas. «Yonathan se dió cuenta de que la gente mayor comienza a perder el sentido del equilibrio, al igual que otros sentidos, y no se da cuenta de que pone todo su peso en los talones», aseguró a ABC Abraham Stamper, cofundador junto a Manor y su otro socio, Aharon Shapiro, de la empresa que ha creado este calzado tan peculiar, B-Shoe.
Según datos proporcionados por Stamper, el punto de equilibrio normal en los pies está entre los dedos y el talón, ya que se apoya principalmente esta parte en el suelo. Las personas mayores, al ir perdiendo el sentido del equilibrio, no se dan cuenta de que tienden a apoyar todo el peso del cuerpo en los talones, lo que propicia las caídas.
«El problema es que para cuando se quieren dar cuenta de que están perdiendo el equilibrio y están a punto de caerse, muchas veces es demasiado tarde, por que no tienen los reflejos suficientes para mover la otra pierna a tiempo. Dentro de nuestro zapato hemos puesto sensores que detectan la diferencia de presión en el pie y cuando se desequilibra, aunque sea unos milímetros, mueve el pie para volver a equilibrar el peso», comentó Stamper.
El zapato anti-caídas tiene un mecanis-
LOS SENSORES DEL CALZADO DETECTAN EL DESEQUILIBRIO DEL PIE Y LO CORRIGE PARA EVITAR CÁIDAS
mo motorizado en la suela del zapato conectado a varios sensores y ruedas que actúan restaurando el equilibrio al mover el zapato. Las pruebas para verificar que el prototipo de B-Shoe funciona han sido un éxito, según comentaron desde la empresa, ya que de los diez ancianos de entre 65 y 80 años que participaron en el ensayo, todos consiguieron restablecer el equilibrio sin dificultad.
«Las diez personas, todas ellas con problemas de equilibrio, tuvieron que intentar permanecer de pie con el prototipo mientras unas tablas se movían debajo de sus pies, y el zapato consiguió nivelar el peso del cuerpo y evitar la caída » , afirmó el ingeniero. Ahora que B-Shoe ha conseguido demostrar que puede mantener en pie a las personas mayores, todavía queda un obstáculo para que llegue al consumidor.
También diseños de mujer
«El dinero, claro, siempre es el dinero», sentenció Stamper. Estamos buscando un socio o alguna forma de financiación para que el prototipo comience a fabricarse en cantidades suficientes como para que el coste se abarate. Estos prototipos están hechos a mano y serían carísimos si hubiera que manufacturar cada uno de ellos».
Además de que el prototipo actual es un mazacote antiestético, Stamper y sus socios quieren hacer modelos de mujer también, por lo que están estudiando cómo reducir el tamaño del mecanismo dentro de la suela. «Calculo que de aquí a dos años, si conseguimos la financiación necesaria pronto, se podrá comprar este calzado en tiendas ortopédicas, tanto en modelos de hombre, como de mujer», aseguró Stamper.
Eso sí, según cálculos de la empresa, el precio no bajará de los 500 euros por par, aunque aseguran que es mucho menos dinero de lo que le cuesta la convalecencia al estado por cada persona mayor que se cae.