«Ya estamos en el futuro del tratamiento»
LUÍS PUIG DTOR. DERMATOLOGÍA HOSPITAL DE LA SANTA CREU I SANT PAU DE BARCELONA
Las lesiones cutáneas tienen un enorme impacto psicológico y sobre la calidad de vida, mientras que las lesiones articulares pueden ser invalidantes. El tratamiento de la psoriasis actualmente permite conseguir blanqueamientos completos o casi completos en un 60%-70% de los pacientes, empleando biológicos, con inicio rápido y estabilización de la respuesta.
Sin duda, hay un antes y un después de la aparición de los fármacos biológicos, aunque hay todavía espacio para nuevos tratamientos orales con un perfil de seguridad idóneo.
Sí, incluso aunque no hubiera aparecido la crisis económica, las tasas de crecimiento del gasto farmacéutico en esta y otras enfermedades son insostenibles.
Ya estamos en el futuro. Se han identificado las vías patogénicas más relevantes en la psoriasis y se están desarrollando anticuerpos que per- miten una respuesta más rápida, intensa y mantenida, con escasa producción de anticuerpos contra el fármaco que neutralizan su efecto. Están en desarollo nuevos tratamientos sistémicos y tópicos con mayor eficacia y seguridad, y la probable identficación de los mecanismos iniciales de la enfermedad permitirá desarrolar terapias preventivas, basadas en la estratificación de los pacientes, identificando a aquellos que puedan beneficiarse más de un determinado tratamiento, un inicio precoz (por el riesgo de evolución) o que presenten formas diferenciadas desde el putno de vista genético, patogénico o de tratamiento. Algunas necesidades aún no cubiertas corresponden al campo de la terapéutica tópica (en términos de eficacia y conveniencia), el manejo del prurito y las formas localizadas e incapacitantes de psoriasis (cuero cabelludo, palmoplantar, invertida, genital), especialmente en pacientes «frágiles» que por sus enfermedades de base no son susceptibles de tratamiento sistémico o incluso biológico convencional.