Natural, artesano, tradicional, casero...
Son términos que aparecen cada vez más en los alimentos procesados. « En la mayoría de los casos los fabricantes deciden utilizar estos términos como un mero recurso publicitario, un argumento que pretende ganarse a unos consumidores cada vez más interesados en comer bien, pero de manera engañosa » , critica desde OCU. Desde la organización de consumidores aseguran que aún no hay ningún reglamento que recoja de forma específica la utilización de estos términos concretos. En el caso de « natural » , solo está regulado su uso para las aguas minerales, el yogur, algunas conservas y aromas. Para artesano o tradicional, hay sellos que lo acreditan como la Especialidad Tradicional Garantizada ( ETG), la Indicación Geográfica Protegida ( IGP) o sellos específicos de cada región. En el resto de casos, su utilización no está regulada. OCU ha denunciado ante las autoridades de consumo de las diferentes comunidades autónomas hasta 25 productos (salsas, purés, bollería, caldos y alimentos precocinados de diferentes marcas) que utilizaban estos términos por inducir a error al consumidor. « Estas alegaciones son una exageración, cuando no una falsedad » , aseguran desde OCU a ABC. La organización de consumidores se ha dirigido a Aecosan para solicitar que se adopte cuanto antes una normativa que acabe con estos « engaños y abusos » . Respecto a si estas versiones son mejores que otros procesados, Elena Gascón, dietista- nutricionista de la Facultad de Farmacia y Nutrición de la Universidad de Navarra lo tiene claro: « En general, si son productos que compramos en el supermercado, seguramente su valor nutricional no habrá sufrido una gran variación, por lo tanto hay que restringir su consumo como con otros alimentos procesados » .