¿Cómo sé los óvulos que me quedan?
En general, a partir de los 35 años se produce una caída en picado de la fertilidad por el descenso de la reserva ovárica, pero a veces sucede antes. Conocer el nivel de óvulos de cada mujer adulta es útil para planificar una gestación antes de que sea tarde y poder congelar óvulos si se decide retrasar la maternidad. La reserva ovárica se calcula de dos formas: con una ecografía ovárica o con un simple análisis de sangre. La ecografía permite al ginecólogo hacer un recuento de folículos. Se realiza por vía vaginal, preferiblemente en los primeros días del ciclo ovárico, es decir, con la menstruación o justo unos días después. Con la prueba sanguínea se busca conocer el nivel de hormona antimulleriana, que se secreta en función de la cantidad de óvulos y marca la fertilidad de la mujer. Este análisis se puede realizar en cualquier momento del ciclo y tiene un valor predictivo muy alto. Algunas clínicas de reproducción asistida, como la Clínica Tambre de Madrid ofrece estos test de fertilidad de forma gratuita.