Quirófano inteligente innovador para la cirugía de columna
Dr. Luís Álvarez Galovich, traumatólogo
Vivimos en una época donde son continuos los avances tecnológicos y, en la cirugía, como en otras disciplinas profesionales, se impone hoy un ritmo de cambio que obliga a redeInir las técnicas quirúrgicas.
En la Fundación Jiménez Díaz se ha implantado recientemente un quirófano inteligente de última generación que logra ampliIcar y mejorar sus características tecnológicas para llevar a cabo procedimientos complejos que antes no eran posibles. Este quirófano, también llamado sala de cirugía híbrida, está equipado con dispositivos avanzados que combinan el diagnóstico por imagen de alta calidad, como la resonancia magnética y la tomografía intraoperatoria, con servicios quirúrgicos en un solo lugar, sin necesidad de trasladar al paciente. De esta manera, permite a los cirujanos implementar métodos multidisciplinares para procedimientos mínimamente invasivos.
Ventajas de los quirófanos inteligentes
El beneIcio de este tipo de salas es que en ellas se puede intervenir pacientes más graves y complejos con mucha menor agresión quirúrgica, reducir las incisiones -o incluso evitarlas- con la máxima seguridad para el paciente, ya que existe una alta precisión y podemos resolver cualquier complicación in situ. La implantación de estos procedimientos lleva años de trabajo, pero es en los últimos tiempos, gracias a los avances tecnológicos, cuando ha habido una mayor evolución. En &+++ fuimos pioneros al participar en un estudio sobre la utilización de los sistemas de navegación para la colocación de tornillos pediculares, donde se demostraba la Iabilidad de los sistemas. Sin embargo, el tiempo de cirugía se alargaba y aumentaba la radiación recibida por el paciente al utilizarse imágenes de una TomograIa Computerizada (TC).
Los nuevos sistemas de escopia, como el utilizado en el quirófano híbrido de la Fundación Jiménez Díaz, permiten adquirir la imagen en tiempo real reduciendo a casi una décima parte la radiación recibida. Todo ello ofrece más comodidad al cirujano que realiza la intervención, pero lo más importante es que mejora la seguridad del paciente, evitando riesgos y sufrimiento.
El correcto diagnóstico sigue siendo un factor clave
Es importante recordar que el ejercicio profesional del médico es una ac- tividad que se cumple en dos tiempos principales: en primer lugar, el que corresponde al diagnóstico, identiIcar la enfermedad o la dolencia que afecta al paciente y, en segundo término, la elección del tratamiento. Y es que no hay que olvidar que, aunque los problemas de la columna son frecuentes, la mayoría de las dolencias están relacionadas con problemas musculares y de malos hábitos, y la cirugía debe ser el último recurso dentro de la escala de tratamientos.
Hay que escuchar las necesidades y expectativas del paciente, y en el caso de que la cirugía sea necesaria, emplear las herramientas que las nuevas tecnologías ofrecen para conseguir una rápida recuperación funcional.