Valme, cinco letras que inundaron su pueblo este sábado
La Virgen realizó su salida extraordinaria por el 45 aniversario de la Coronación Canónica
Un 23 de junio para el recuerdo. La Virgen de Valme salió en procesión extraordinaria con motivo del 45 aniversario de su Coronación Canónica. Sus reglas marcan que cada 23 de junio que coincide con la jornada del sábado, la protectora de los nazarenos saldrá en procesión extraordinaria. Un pueblo volcado con su devoción engalanando cada rincón de su recorrido y mostrando a cada instante el cariño que profesan a la Virgen de Valme.
La Función Principal celebrada por la mañana ya congregó a muchos nazarenos que abarrotaron la Parroquia de Santa María Magdalena, una función presidida por el Cardenal Carlos Amigo Vallejo. Las puertas de la parroquia se abrieron a las 21.00 horas con la cruz alzada seguida de todas las representaciones de las diferentes hermandades, cofradías y asociaciones de Dos Hermanas que no faltaron a la cita con la protectora de los nazarenos. El cortejo continuó hasta la calle Alcoba donde se retiraron en la casa de hermandad del Rocío.
La Agrupación Musical Nuestra Señora de Valme abrió la comitiva con sus sones musicales, y la Escolanía de Regina Coeli acompañó a la Virgen de Valme delante de su tumbilla. Tras la protectora de los nazarenos acompañó la Sociedad Filarmónica de la Oliva de Salteras.
Pero las calles, además de engalanadas como el día grande que fue, estuvo llena de ofrendas a través de sevillanas y cantos a su paso que los nazarenos fueron regalándole desde los balcones de su recorrido. También la alfombra de sal que la hermandad del Santo Entierro preparó en la calle de Nuestra Señora de Valme en su casa de hermandad al paso de la Virgen de Valme. La hermandad del Rocío preparó otra alfombra de sal en la calle Alcoba con la fecha de la coronación y el escudo de la hermandad, un precioso detalle que el pueblo de Dos Hermanas agradeció por los momentos que allí se vivieron.
Verdaderos altares por las calles de Dos Hermanas engalanaron el recorrido, como el que se pudo ver en la calle Aníbal González con un cuadro de la Virgen de Valme y una de las ruedas de carreta representativa de la romería. El coro de la propia hermandad se encargó de adornar la calle Lope de Vega que lució unos arcos y adornos de flores de papel que hicieron vivir momentos muy especiales en este punto del recorrido. Los sones musicales de la Oliva de Salteras unido al buen hacer de la cuadrilla de costaleros comandada por Juan Lozano Pérez y Juan Lozano Navarro, hicieron del 23 de junio, un día inolvidable para los nazarenos.
La Virgen de Valme lució el manto de terciopelo rojo bordado en oro que la Corporación Municipal de Dos Hermanas le regaló hace 50 años en 1968 con motivo del cuarto aniversario de su patronazgo. La protectora de los nazarenos fue sobre su jamuga de plata labrada por Fernando Marmolejo para la Coronación. Uno de los momentos más especiales fue la llegada a la Plaza Menéndez y Pelayo donde los carreteros tenían preparada la plaza con colgaduras y las propias carretas.
La próxima salida en sábado 23 de junio será dentro de 11 años, aunque a la vista queda el cincuentenario de la coronación que como el Cardenal Carlos Amigo Vallejo dijo en la Función Principal, «ya hay que ir preparándolo» y quien sabe si podrá verse de nuevo a la Virgen de Valme en su paso procesional por las calles de Dos Hermanas. Aunque para eso, queda aún cinco años y ahora los nazarenos disfrutan del recuerdo de un 23 de junio lleno de fervor y devoción a su Virgen de Valme, la protectora de los nazarenos.