Referente de la educación
El colegio Rodrigo Caro de Utrera cumple medio siglo de vida y ya prepara un calendario de actividades para celebrarlo
Después de los meses de verano, marcados por las excursiones a la playa, los baños en la piscina y las largas noches de vacaciones, los niños utreranos poco a poco están retornando a las aulas. Un curso 2018-2019 que va a ser especial para uno de los colegios más queridos de la localidad, como es el Rodrigo Caro, un centro público que está celebrando sus bodas de oro, ya que abrió sus puertas por primera vez en septiembre de 1968. El actual colegio Rodrigo Caro es el heredero de un centro de educación emblemático en la localidad, que cuenta con una dilatada historia. Fue en la fecha aproximada de 1648, cuando la congregación jesuita puso en marcha un colegio prácticamente en las mismas instalaciones que en la actualidad ocupa el colegio Rodrigo Caro, que durante muchos años se ha conocido de manera popular entre los utreranos como el colegio de San Francisco, al estar junto a la iglesia del mismo nombre.
A lo largo de estas últimas cinco décadas, el colegio ha experimentado un proceso de modernización para adaptar tanto sus instalaciones a los nuevos tiempos como a los desafíos educativos que exige la actual sociedad. Se ubica en un edificio sólido y sin barreras que ha sido modernizado recientemente gracias a la puesta en marcha de varias obras. Según explican desde la propia institución educativa, uno de los pilares más importantes en la actualidad del colegio es la denominada «inclusión educativa, donde a cada persona se le trata como única e irrepetible. Con sus dificultades, limitaciones, potencialidades y talentos. Todos diferentes pero iguales».
Es importante también en la actualidad la educación en valores, «donde a modo de rutina se trabajan los principios que toda sociedad debe sostener. Y sobre todo un equilibrio perfecto entre lo bueno de la pedagogía tradicional, basada en el esfuerzo, trabajo y disciplina y la más innovadora, centrada en la neuroeducación, potenciando el liderazgo personal y el desarrollo emocional», explican desde el colegio.
Otra de las novedades es un programa que se ha creado en el colegio que llega bajo el nombre de DIEM (Desarrollo de la Inteligencia Emocional y Mindfulness), coordinado por el colegio y la formadora de familias María del Carmen Díaz Cadenas, que tiene como objetivo «que en lugar de reaccionar, respondamos. Esto es, parar, pensar y elegir las acciones que estimemos más idóneas, en base a nuestros valores, principios y objetivos».
Bodas de oro
Con el objetivo de celebrar este curso especial, desde el colegio se ha llevado a cabo la creación de una página en Facebook llamada «50 aniversario Rodrigo Caro», donde todos los antiguos alumnos que han pasado por las instalaciones del colegio puedan ver o publicar recuerdos relacionados con el centro educativo. A lo largo del curso se irán comunicando las diferentes acciones y actividades que van a dar vida a este aniversario.
Una serie de actos que ya dieron comienzo el pasado curso con la plantación de diez árboles en la zona de Vistalegre, para conmemorar el día de la familia. La dirección del colegio ha comunicado que en este curso se plantarán cuarenta árboles más —para llegar así a la cifra simbólica de cincuenta-, y que se van a realizar jornadas de puertas abiertas, visitas por el edificio, una Olimpiada conmemorativa, charlas, conferencias, la inauguración de un azulejo alusivo y una jornada de clausura al finalizar el curso en forma de cena de gala.
Desafío educativo El colegio se ha ido modernizando para adaptar sus instalaciones a los nuevos tiempos