Simeone, en su peor inicio, obligado a tirar de la cantera
El Atlético de Madrid afronta hoy ante el Éibar la cuarta jornada de Liga y Diego Simeone, en su peor inicio de campeonato, ya se ve obligado a recurrir a las categorías inferiores para completar la convocatoria. Las lesiones y la sanción de Savic, expulsado en la visita a Vigo, han dejado a su equipo con solo 16 jugadores de la primera plantilla, por lo que el argentino ha tenido que reclutar al lateral Solano y al delantero Borja Garcés para un partido al que los rojiblancos llegan en estado de alerta porque solo han almacenado cuatro puntos en sus primeros tres encuentros. Con Vitolo fuera de combate desde hace semanas, al técnico argentino, que como el pasado curso ha preferido construir un vestuario corto, se le han acumulado las bajas durante el parón de selecciones con los problemas físicos de Arias y Kalinic. Al técnico, sin embargo, nunca le ha dado vértigo mirar al filial y ayer volvió a explicarlo. «Nosotros, con el club, aceptamos el desafío y la dificultad que podíamos tener en cuanto a una plantilla corta. Cuando estén todos, habrá una competencia muy importante, porque hay una paridad muy grande en muchos de los futbolistas que tenemos y eso le va a servir al equipo», afirmó.
El Atlético llega presionado por la clasificación al duelo en el Metropolitano, que celebra su primer aniversario, y por un Éibar que el pasado curso arrancó un punto.