«En Cataluña y País Vasco rechazan el diccionario gratis para los centros»
La situación de la RAE no es solo cuestión de recortes y falta de apoyo político. Según algunos académicos, la magna institución ha perdido parte de su autoridad y su director no se ha hecho valer como debería en esas circunstancias. Ponen como ejemplo el encargo del Gobierno para estudiar la reforma de la Constitución en términos de lenguaje inclusivo, porque «la Academia ya se ha pronunciado sobre eso y había que haberlo dejado claro». A ello se suma la denuncia de que Fundeu, la Fundación del Español Urgente, se ha desviado, más de una vez, del criterio dictado por la RAE. O que la Academia se haya visto envuelta en sucesivas polémicas y peticiones para que se cambien acepciones consideradas machistas y otras supuestas agresiones del lenguaje a minorías. La guinda la ofrecen los diccionarios almacenados. Había un remanente de 50.000 de la última edición sin vender. La Academia explicó que «hemos hecho una oferta para 20.000 ejemplares en países de África Subsahariana, en países de Iberoamérica... Y también a las Autonomías, para sus bibliotecas y centros educativos, de forma gratuita. Cataluña los ha rechazado. El País Vasco también». Algo que no se sabía hasta ahora.