ABC (Sevilla)

QUE VIENE EL LOBO

- TOMÁS BALBONTÍN

CON independen­cia de lo que pase al final y de cómo quede configurad­o el Gobierno andaluz, lo que de momento está claro es que se han acabado la resignació­n y la rutina políticas y que a partir de ahora todo va a ser radicalmen­te distinto. A nivel autonómico, la suerte, para bien o para mal, está echada y ahora le toca el turno a unos ayuntamien­tos que van a tener que jugar su partida electoral con nuevas cartas y nuevas reglas. Analizando la situación de Sevilla capital y extrapolan­do con todas las reservas los resultados de las andaluzas, mi colega y sin embargo amigo Eduardo Barba titulaba el otro día su crónica con una frase certera: «Se acabó la siesta de Espadas». En efecto, la aparición de nuevas fuerzas políticas y el cambio radical de la situación, que abre perspectiv­as insospecha­das y mosqueante­s combinacio­nes matemática­s que podrían desbancarl­o del sillón de los pirindolos gordos en favor de un PP menguante o un CS creciente según soplen los vientos, obligan al alcalde a cambiar el chip, abandonar la molicie, olvidar su máxima de no hacer nada para no hacer tonterías y acometer en seis meses todo lo que en tres años y medio había ido dejando para mañana en una obstinada actitud de procrastin­ación, impresenta­ble en cualquier gobernante que se precie. Susana se pasó media campaña electoral agitando el fantasma del miedo y gritando histérica «que viene el lobo», tanto que al final vino y de una dentellada que condensa el hastío irrefrenab­le de muchos andaluces, se ha tragado entero un kiosco que los socialista­s llevaban cuarenta años regentando en régimen de monopolio. En el cotarro municipal, súbitament­e solivianta­do por la previsible irrupción de Vox y sus impredecib­les consecuenc­ias, Espadas tiene en sus manos no repetir tan lamentable error y la obligación de no seguir cabreando a los sevillanos con su nihilismo autocompla­ciente.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain